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Violencia vicaria: Madres acusan a Barra Mexicana de Abogados de proteger agresores

Madres víctimas de violencia vicaria denuncian complicidad, guía y ayuda por parte de los abogados hacia sus agresores.

Frente Nacional de Mujeres.Madres víctimas de violencia vicaria denuncian complicidad, guía y ayuda por parte de los abogados hacia sus agresoresCréditos: Aseneth Hernández
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Madres integrantes del Frente Nacional de Mujeres (FNM) denunciaron artimañas jurídicas y argucias legales por parte de abogados que se vuelven cómplices de violencia vicaria de género en contra de mujeres. Afuera de la Barra Mexicana de Abogados (BMA), acusaron connivencia de la presidenta de la institución, Claudia Elena de Buen Unna.

Mujeres que han sido víctimas de violencia vicaria acudieron a las instalaciones de la BMA para señalar que abogados, no sólo son cómplices de agresores, sino que ellos mismos conducen a los clientes a interponer denuncias con acusaciones falsas, a secuestrar hijos o evadir la justicia, pues son los litigantes quienes conocen el tinglado del sistema de justicia.

Mediante un comunicado, el Frente narra un caso en el que una madre fue detenida para que pudieran arrebatarle a sus hijos. Se narra que el padre de la mujer sufrió una impresión tan fuerte que murió un mes después.

“Si el progenitor masculino agresor cuenta con un experto hampón jurídico, se vuelve muy fácil arrebatarle a una madre a sus hijos y que no se vean por años, perderse sus primeros pasos, sus primeras palabras privarlo de sus cuidados, en su gremio hay expertos”, señalan.

En este sentido, piden que los casos más urgentes del FMA sean atendidos de forma pro bono. Que la BMA reforme su código de ética con perspectiva de género y que se fomenten acciones en contra de la violencia vicaria. 

Claudia de Buen, presidenta de la Barra, se comunicó con una de las integrantes del Frente alrededor de las 10:00 horas para informarles que están abiertos al diálogo. No obstante, las oficinas están cerradas con barras de madera, lo que las madres que representan a víctimas de violencia vicaria interpretan como poca disponibilidad para el diálogo e, incluso, complicidad con los abogados que incurren en este tipo de malas prácticas.