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Viruela del mono y coronavirus: Semejanzas y diferencias de las enfermedades virales

La OMS ha detectado más de 80 casos de la famosa "Viruela del Mono" en 12 países diferentes.

Estas son algunas semejanzas y diferencias del COVID-19 y la viruela del mono.Créditos: Especial.
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La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó que se han detectado más de 80 casos de la famosa "Viruela del Mono" en 12 países diferentes, pero ¿será esta otra pandemia? Te decimos qué semejanzas y diferencias tiene esta enfermedad con el COVID-19.

El brote de viruela del mono ya se ha convertido en el mayor reportado fuera de África desde que se tiene registro y la OMS consideró que su presencia en 12 países es "atípica" por ocurrir en lugares "no endémicos".

Esta es la primera vez que tantos países del mundo detectan a la par nuevos casos en el mismo lapso de tiempo y muchos de ellos sin conexión aparente o sin historiales de viaje a África.

¿Cuáles son los síntomas?

Las agencias de salud han recomendado a sus poblaciones estar atentas a los síntomas y acudir al médico si hay sospecha de estar contagiado con el virus del mono, principalmente si se ha estado de viaje en las últimas tres semanas, que es el periodo de incubación de la enfermedad.

De acuerdo con la Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido (Ukhsa, por sus siglas en inglés), los síntomas de la enfermedad suelen ser parecidos a los del COVID-19 o una gripe normal, como son:

  • fiebre
  • dolor de cabeza
  • dolores musculares
  • dolor de espalda
  • escalofríos
  • agotamiento
  • ganglios linfáticos inflamados

Sin embargo, el principal síntoma que diferencia a la viruela del mono del coronavirus son las erupciones que comienzan a aparecer de 1 a 5 días después de la fiebre, a menudo en la cara y luego en otras partes del cuerpo, principalmente manos y pies, aunque en los casos actuales, las personas han reportado la aparición de la erupción en la zona genital.

¿Cómo se contagia?

Al igual que el COVID-19, la viruela del mono se puede transmitir por contacto y exposición a gotas, lo cual, puede ocurrir a través de la saliva o secreciones respiratorias como tos o estornudos.

También se puede contagiar por partículas que emanen de las heces y por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de una persona infectada, así como con objetos contaminados.

Las autoridades han destacado que estar atentos a los síntomas es clave, porque la viruela del mono, a diferencia del COVID, no se transmite antes de que las personas desarrollen síntomas.

Además, una persona puede contagiar a otra hasta que todas las costras se hayan caído y haya piel intacta debajo, por lo que a las personas infectadas se les recomienda aislarse para evitar transmitir la enfermedad a otros.

¿Es una enfermedad de transmisión sexual?

Aunque no había registrado este tipo de comportamiento, las autoridades de Reino Unido, donde se ha reportado hasta ahora una de las mayores cantidades de casos, investigan como patrón que muchos de los enfermos son hombres que tienen sexo con otros hombres.

Aunque se ha valorado que el virus pudo haber mutado y ahora también puede ser de transmisión sexual, epidemiólogos y virólogos británicos creen que al final esto se debe a que el virus se ha seguido transmitiendo de una forma ya conocida: el contacto cercano piel con piel.

Por ello, la agencia de salud británica ha decidido ponerse en contacto con clínicas de atención a personas LGBTI y alertar sobre la aparición de lesiones en la piel.

Además, se sugiere usar pañuelos desechables en caso de toser y estornudar y, si puedes, evitar hacerlo con otras personas cerca de ti.

Sin embargo, al igual que sucedió con el COVID-19, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) recuerdan que lavarse las manos sigue siendo una acción decisiva contra el virus.