Ángel Yael, el estudiante de la Universidad de Guanajuato que fue asesinado por un agente de la Guardia Nacional, murió a causa de un impacto de bala de alto calibre que recibió en el cráneo; sin embargo, tenía otras heridas en su cuerpo que se produjeron con arma de fuego, debido a que rafaguearon el vehículo que conducía del lado del copiloto y él iba manejando, de acuerdo con Moisés Campos Domínguez, su primo.
Durante una entrevista que Humberto Padgett presentó con Manuel Feregrino en "Por la Mañana", el primo de la víctima de 19 años consideró que "no hay ninguna evidencia justificada para que pueda ocurrir una rafagueada de ese estilo".
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"Estamos consternados, la verdad aún no podemos entender qué fue lo que pudo motivar a estas personas de la Guardia Nacional a cometer este delito", señaló.
El ataque se registró el pasado 27 de abril en la localidad de 'El Copal', ubicada en el municipio de Irapuato, y fue a 50 metros de la Rectoría de la Universidad de Guanajuato. Los jóvenes se retiraban de un convivio de la comunidad universitaria, cuando los elementos de seguridad les pidieron a los 3 jóvenes que viajaban en el mismo vehículo detenerse, pero estos no les hicieron caso.
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Posteriormente, los alcanzaron y el elemento de seguridad les disparó. Lo que provocó la muerte de Ángel y que Edith Alejandra, estudiante de 22 años, resultara herida. La joven tenía la clavícula destruida, por lo que tuvieron que operarla de emergencia y actualmente se encuentra fuera de peligro.
Además, Moisés Campos indicó que el gobierno municipal y estatal han acompañado a su familia, tras el homicidio del estudiante de 19 años.
Hasta ahora, no ha existido acercamiento de la Guardia Nacional o del gobierno federal, según el primo de Ángel, pero dijo que van 2 veces que ven camionetas de la dependencia de seguridad cerca de la funeraria en la que realizan los servicios fúnebres.