Quienes antes rechazaban a Rosario Ibarra de Piedra, tras su fallecimiento aseguran que siempre fueron amigos, criticó la escritora Elena Poniatowska.
“Ahora todos aplauden y dicen que fueron sus amigos, pero eso es una mentira. Nadie la ayudó y todo el mundo la rechazó”, aseguró Poniatowska en entrevista con Ciro Gómez Leyva.
La escritora Elena Poniatowska lamentó el fallecimiento de la activista y relató que Rosario Ibarra se acercó a ella durante una marcha contra el nombramiento del expresidente Gustavo Díaz Ordaz como embajador de España.
En aquella ocasión, Rosario Ibarra relató a Elena Poniatowska la historia de su hijo desaparecido y, mientras llovía, le compartió que se preguntaba en dónde estaría mojándose bajo la lluvia.
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“Publiqué todo lo que pude sobre el caso. La visité en su casa tapizada con fotografías de su hijo”, narró la periodista y escritora.
Rosario Ibarra de la Garza, mejor conocida como Rosario Ibarra de Piedra, fue una mujer originaria de Coahuila que dedicó gran parte de su vida a buscar y denunciar la desaparición forzada de su hijo Jesús Piedra Ibarra, integrante del grupo guerrillero Liga 23 de Septiembre.
Ibarra de Piedra fundó el Comité Pro Defensa de Presos, Perseguidos, Desaparecidos y Exiliados Políticos (Comité ¡Eureka!) y fue candidata a la Presidencia en 1982 y 1988 por el Partido Revolucionario de los Trabajadores, hoy extinto.
El 23 de octubre de 2019, a 44 años de la desaparición de su hijo, el Pleno del Senado de la República aprobó otorgarle la medalla de Honor Belisario Domínguez como un reconocimiento por su labor como activista y defensora de los derechos humanos.
Elena Poniatowska, quien se encuentra en vísperas de cumplir 90 años y recibir un honoris causa por la universidad Cesar Vallejo de Perú, recordó que en los primeros años de cobertura periodística sobre el activismo de Rosario Ibarra de Piedra los medios de comunicación le sugerían dejar de darle seguimiento al tema.