Esta semana comenzó en varías entidades del país la aplicación de dosis de refuerzo a la población de 30 a 39 años de edad con las vacunas Sputnik V y AstraZeneca, pero ¿cuáles son los efectos secundarios de estos biológicos? Te contamos.
De acuerdo con la Secretaría de Salud, los efectos secundarios más comunes para la vacuna contra el COVID-19 de la marca AstraZeneca son: dolor en el sitio de inyección, cansancio, dolor de cabeza, músculos y articulaciones, así como fiebre y escalofríos.
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Sin embargo, detalló, que estas suelen ser más leves y menos frecuentes tras la primera dosis.
En cuanto a los efectos secundarios de la vacuna Sputnik V, los más comunes son: dolor, enrojecimiento e hinchazón en el sitio de la inyección, cansancio, dolor de cabeza y músculos, escalofríos, fiebre y náuseas.
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La secretaría de Salud indicó que se pueden utilizar medicamentos analgésicos y/o antipiréticos, como los que contienen paracetamol, para proporcionar un alivio sintomático de las reacciones adversas posteriores a la vacunación.
Sobre la vacunación en el embarazo, la dependencia recordó que se recomienda a partir de la novena semana de embarazo y destacó que el riesgo de complicaciones por COVID-19 en esta etapa aumentan con la edad, sobre todo a partir de los 30 años, del segundo trimestre, o en mujeres embarazadas con sobrepeso, diabetes, hipertensión o enfermedades cardiacas y respiratorias.
Al igual que el resto de la población, los efectos secundarios más comunes por la aplicación de la vacuna son: dolor en la zona de la inyección, cansancio, dolor de cabeza; con menos frecuencia escalofríos o fiebre y dolor muscular.
Sin embargo, destacó la importancia de acudir al médico si las embarazadas presentan: Fiebre o calentura, salida de líquido o sangre de la vagina o dolor abdominal intenso.
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aclaró que muy raramente, tras la vacunación, se ha notificado el síndrome de Guillain-Barré. “No se ha podido confirmar, ni descartar que ello guarde relación causal con la vacuna: hacen falta estudios más rigurosos para evaluar a fondo la significación de estos eventos”.