La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) exhortó al gobierno de Chiapas a garantizar el derecho a la vida de los habitantes que viven en las comunidades de Aldama y Chenalhó; así como a preservar el Estado de Derecho y a realizar con “eficiencia, oportunidad e imparcialidad” las investigaciones para identificar a los probables responsables de la violencia que azota ambas comunidades.
El organismo también condenó las 36 agresiones con arma de fuego que se registraron en el municipio de Aldama el fin de semana pasado; las cuales fueron denunciadas a través de una acción urgente del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas.
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A causa de los ataques, un indígena tsotsil, identificado como Javier Hernández de la Torre, fue herido de bala el pasado 9 de enero en la comunidad de Tabac, en Aldama, de acuerdo con el centro de derechos humanos. Él y su familia se dirigían al campo donde trabajan; sin embargo, en el camino fueron interceptados por disparos que provenían de Santa Martha, Chenalhó.
Afortunadamente, su esposa y sus hijos resultaron ilesos. La víctima fue hospitalizada en el Hospital de Las Culturas en San Cristóbal de las Casas. Además, el centro reportó que los ataques continúan en las comunidades de Tabac, Juxton, Chivit, Xuxchen y Stzelejpotobtik. Por lo que los habitantes temen por su vida, seguridad e integridad personal.
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Asimismo, la CNDH detalló que realiza las investigaciones correspondientes para proteger, defender y garantizar los derechos de las víctimas, en apego al acuerdo de atracción que firmó el 10 de diciembre del año pasado.
Aunado a ello, vigila las medidas cautelares que fueron dirigidas a varias autoridades del gobierno de Chiapas y a la Guardia Nacional para que garanticen la seguridad, vida e integridad física de los residentes.
Por otra parte, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé hizo un llamado al Estado mexicano para que cumpla con las acciones de prevención y protección de los habitantes de Aldama.
Tal y como lo indicó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en las medidas cautelares que emitió en las resoluciones del 24 de febrero de 2018 y del 23 de abril de 2021.
¿Cómo inició el conflicto entre ambas comunidades?
El conflicto entre las comunidades de Aldama y Chenalhó inició por la disputa de 59 hectáreas del primer municipio que se resolvió en 2009. Esto sucedió gracias a que los comuneros de ambas partes firmaron un acuerdo con el gobierno de la entidad.
En el documento establecieron que Aldama se quedaría con las tierras y Chenalhó recibiría una indemnización de 1 millón 300 mil pesos.
Aunque el acuerdo se rompió en 2014, cuando los habitantes de Aldama no quisieron compartir el agua del manantial de Chayomté a Santa Martha, en Chenalhó. Por lo que estos dijeron que el arreglo quedaba anulado.