Si alguna vez has comprado un pan con una textura increíble, crujiente por fuera y esponjoso por dentro, y al día siguiente ya no está blando, conoce por qué el pan se pone duro y el truco para conservarlo fresco hasta por 3 meses.
Esta desafortunada situación en la que el pan se endurece es una experiencia normal que a todas las personas les ha pasado al menos una vez y puede atribuirse a varios factores.
¿Por qué el pan se pone duro?
La humedad es un factor importante en la textura del pan. Cuando ese alimento se expone al aire, la humedad presente en su interior se evapora gradualmente. Este proceso se conoce como retrogradación del almidón.
Dicho proceso implica que las moléculas de almidón en el pan se reorganizan cuando se enfrían, formando una estructura más cristalina y compacta, dando como resultado que se ponga duro.
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Ahora bien, la composición del pan juega un papel vital en su tendencia a endurecerse, pues aquellos con una mayor cantidad de gluten tienden a retener más humedad, lo que les concede una textura más suave y elástica, mientras que los panes bajos en gluten, como los integrales, endurecen más rápido debido a su menor capacidad de retener humedad.
El truco para evitar que el pan se ponga duro y se conserve fresco hasta por 3 meses
Existen varios métodos simples para prolongar la frescura del pan y prevenir su endurecimiento. Sin embargo, el mejor truco para evitar que se ponga duro y se conserve fresco hasta por 3 meses es: congelarlo. Por increíble que parezca, la congelación es lo mejor para que mantener su frescura.
Si no planeas consumirlo de inmediato, corta el pan en rebanadas, coloca porciones individuales en bolsas de plástico o recipientes con cierre hermético y guarda en el congelador. Para consumirlo se recomienda pasarlo al refrigerador tres horas antes y luego dejarlo a temperatura ambiente.
Aunque el horno o el microondas descongelan rápido, no se aconseja su uso, pues al hacerlo harás que el proceso de congelamiento no haya servido de nada y además, el pan perderá su frescura y textura. Lo mejor es sacar sólo las rebanadas que vayas a comer, para no retirar todos los pedazos.
De acuerdo con el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), "los productos de pan conservan su calidad si se almacenan en el congelador durante 3 meses".
Otros trucos para evitar que el pan se ponga duro
- Almacenamiento adecuado: Guardar el pan en un recipiente hermético o una bolsa de tela o papel es la mejor opción para reducir la pérdida de humedad y retrasar su endurecimiento. Por nada del mundo lo almacenes en una bolsa de plástico (sólo para congelar), pues según The New York Times, "el pan que se guarda en una envoltura de plástico sobre el mostrador se enmohece porque la combinación de retención de humedad más la temperatura hace que el ambiente sea perfecto para que crezcan las esporas".
- Rebanar lo indispensable: Cortar sólo las porciones necesarias de pan y dejar el resto sin cortar puede ayudar a mantener su frescura por más tiempo, pues así se reduce la exposición al aire, evitando el endurecimiento.
- Uso de contenedores especiales: Los cajones diseñados específicamente para almacenar pan proporcionan un ambiente óptimo para mantener su frescura por más tiempo al controlar la circulación de aire y humedad. Procura que la panera sea de madera, pues las de plástico, además de ser menos ecológicas, no dejan transpirar al pan y hacen que se reblandezca y quede gomoso.
Ahora que conoces por qué el pan se pone duro y el truco para conservarlo fresco hasta por 3 meses, podrás disfrutar de un panecito fresco y crujiente por más tiempo.