Si has tenido la mala suerte de romper un huevo podrido a la hora de cocinar, te revelamos tres trucazos para que sepas si está en mal estado sin necesidad de 'abrirlo'.
¿Cómo saber si un huevo ya no sirve?
Para que no te lleves una desagradable sorpresa a la hora de romper un huevito, puedes hacerle algunas pruebas que te ayudarán a descubrir si está fresco o echado a perder.
-
Prueba de luz
Enciende la lámpara de tu celular y coloca el huevo sobre ésta, si está en buen estado la luz se reflejará uniformemente a través del cascarón; en tanto, si no atraviesa la luz, es señal de que está podrido.
-
Prueba de agua con sal
Llena un recipiente con agua y añádele un poco de sal; después, echa el huevo, si flota, quiere decir que no está en buen estado, pero si se queda en fondo está perfecto para comerse.
Te podría interesar
Sumado a lo anterior, si el huevo se mantiene en forma horizontal, indica que su frescura es óptima; sin embargo, si se queda en posición vertical, podría estar perdiendo calidad.
-
Prueba del movimiento
Acerca el huevo a uno de tu oídos y agítalo suavemente, si no escuchas nada, puede cocinarlo con tranquilidad; pero si oyes que algo se mueve adentro, seguramente ya no sirve.
Ahora ya sabes cómo identificar un huevo podrido sin romperlo, para evitar malos momentos a la hora de cocinarlo y echar a perder tu comida.
¿Qué pasa si como un huevo podrido?
Comer un huevo podrido podría causar una intoxicación alimentaria, que puede provocar problemas de salud como vómitos, diarrea y dolor abdominal; así como síntoma parecidos a los de la gripe, entre ellos fiebre, dolor de cabeza y dolor corporal, menciona la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).
