El platillo de Rusia más conocido en México es, quizás, la ensalada Olivier, a la que conocemos popularmente como “ensalada rusa”. Esta pieza de la comida tradicional rusa es elaborado con papa, zanahoria, huevo, pepinillos y mayonesa es del gusto de muchos mexicanos.
Sin embargo, existen otros platillos también famosos que puedes probar. Por ello, aquí te dejamos 3 platillos para que puedas conocer más opciones.
Te podría interesar
Primer tiempo: Borsch
El Borsch es una sopa agria popular en diversos países de Europa del Este y Asia. Se trata de un platillo por cuyo origen pelean diversas nacionalidades, desde Ucrania hasta Polonia, pasando por Lituania, Rumania y Rusia.
Esta sopa consiste en una combinación de verduras salteadas que puede incluir remolacha, repollo, zanahoria, cebolla, papa y jitomate con caldos que pueden provenir de la carne o el hueso de res, cerdo o pescado.
Te podría interesar
En una de sus variantes es preparada con base en remolacha; sin embargo, a lo largo de la región se encuentran también variedades elaboradas a partir de centeno o col. Algunas versiones contemporáneas incluyen frijoles, manzana, apio y calabacín, entre otros ingredientes. Esta sopa puede encontrarse tanto en su versión caliente como fría, caracterizada esta última por su sabor dulce.
El platillo ha atravesado continentes de la mano de migrantes judíos hasta llegar a América Latina. La gran diversidad de formas en las que se puede preparar este platillo da fe de su movilidad.
Plato fuerte: Stroganoff
Otro platillo conocido y relacionado con la comida tradicional rusa es el filete Stroganoff. Un platillo que mezcla la tradición culinaria francesa con la rusa al combinar lomo de ternera marinado en salda de soya o Worcestershire con champiñones, mostaza, azúcar, pimienta, cebolla, harina y vino blanco.
A diferencia de la sopa Borsch, este platillo no es de origen campesino, sino que está relacionado con la nobleza y debe su popularidad a lo largo del mundo a la migración de aristócratas que sucedió tras la revolución soviética de 1917.
Sin embargo, en el mundo no sólo destacan los platillos salados provenientes de Rusia, también existen postres que han logrado fama mundial. Es el caso de la tarta de miel o Medovik, un pastel representativo de la repostería del país elaborado principalmente con miel y mantequilla.
Y para el postre...
La tarta Medovik se caracteriza por su construcción de finas láminas de pan intercaladas por una crema de vainilla. Es un postre muy aromático, sencillo de preparar y es una de las opciones más fáciles de encontrar en México para degustar la comida tradicional rusa.