Los libros de texto gratuitos de la Secretaría de Educación Pública (SEP) que se distribuyen entre estudiantes de primaria y secundaria han provocado diversas críticas por su contenido, ya que se modificaron y eliminaron conocimientos básicos e indispensables para los alumnos y alumnas. Además, se agregaron otros con los que diversos especialistas estuvieron en desacuerdo.
Aunado a ello, la SEP anunció la implementación de un nuevo plan de estudios para el nivel básico que no cuenta con los fundamentos necesarios para enfrentar el rezago educativo que provocó la pandemia de COVID-19 y "atenta contra la formación de talento y de capital humano competitivo", de acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Y es que es necesario recordar que la emergencia sanitaria provocó un rezago educativo que equivale a dos años de escolaridad y dejó fuera a 1.5 millones de estudiantes del sistema educativo mexicano.
Este rezago podría provocar una reducción de 8 por ciento en los ingresos de los estudiantes a lo largo de su vida. El el ciclo escolar 2023-2024 arranca el próximo 28 de agosto y ante las dudas de la viabilidad del nuevo plan de estudios, así como del uso de los libros de texto gratuitos, el IMCO analizó la información que la SEP publicó para conocer el impacto que podrían tener en el futuro de la población estudiantil.
Te podría interesar
"El proceso para la implementación de este nuevo plan de estudios fue planeado al vapor", advirtió el IMCO y coincide con lo que han señalado diversos especialistas y organizaciones, algunas conformadas por padres y madres de familia.
Si no son sólo los libros de texto, entonces ¿cuáles son los riesgos del nuevo modelo?
El IMCO destacó que la educación a nivel mundial debe adaptarse a nuevas realidades y las modificaciones tienen que orientarse a garantizar el éxito personal, igual que el académico, de los estudiantes. En el caso del nuevo plan de estudios de la SEP, el centro de investigación identificó cuatro cambios que podrían agravar el problema educativo.
1. La formación de talento preparado deja de ser una prioridad: El nuevo plan de estudios de la SEP establece que "no es función de la escuela formar capital humano desde la educación preescolar, primaria y secundaria hasta la educación superior para responder a los perfiles que establece el mercado laboral".
Al respecto el IMCO señaló que la educación de calidad permite que los estudiantes adquieran habilidades necesarias para aspirar a trabajos de calidad y bien remunerados. También indicó que quitarle importancia a los conocimientos y habilidades del mercado laboral pone en riesgo el futuro de niños, niñas y adolescentes. A su vez reduce la movilidad social y resta competitividad al país.
2. Se resta importancia a la adquisición de aprendizajes clave: El nuevo plan de estudios está basado en un enfoque comunitario y, según el centro de investigación, irá en "detrimento" de la enseñanza de conocimientos y habilidades que son importantes en el contexto global.
Esto se debe a que los contenidos se organizaron en cuatro campos formativos: Lenguajes; Saberes y pensamiento científico; Ética, naturaleza y sociedades; De lo humano y lo comunitario. Lo que indica que se busca promover una educación integral: sin embargo, para lograrlo es necesario que haya una planeación articulada, capacitación docente en todos los ejes, dinámicas de clase diseñadas para lograr los aprendizajes esperados y evaluaciones que midan los resultados.
El IMCO advirtió que la transversalidad no sustituye la enseñanza de disciplinas vitales para el desarrollo académico de un estudiante, como la comprensión lectora o matemáticas, y el nuevo plan de estudios podría limitarse a un uso práctico.
3. Se pierde la continuidad de los estudios en bachillerato en el cambio de secundaria a bachillerato: El nuevo plan de estudios de la SEP desintegra la ruta de continuidad que había desde la educación inicial hasta el bachillerato.
Esto sucede a pesar de que los planes de estudio se hicieron oficiales bajo la idea de que se trata de una estrategia unificada. No obstante, en la práctica no sucede así y esto representa un paso atrás en el diseño de planes educativos para la educación básica en México.
"Que los planes de estudio entre grados carezcan de una secuencia lógica podría entorpecer el avance de educación secundaria a media superior", apuntó el IMCO. Lo que podría agravar el nivel de deserción escolar, ya que el bachillerato es el que presenta una cifra mayor de abandono.
4. La autonomía sin límites de los docentes tiene riesgos: El nuevo plan de estudios no tiene límite para la autonomía curricular, la cual se implementó desde el modelo educativo de 2017.
A través de la autonomía curricular se garantiza que los docentes tengan un número determinado de horas semanales para agregar clases de diferentes temáticas. Por lo que pueden personalizar y adaptar los contenidos, métodos de enseñanza, evaluaciones y actividades de aprendizaje de acuerdo con las necesidades, intereses y el entorno de los estudiantes.
El IMCO advirtió que si se implementa el nuevo plan de estudios de la SEP para nivel básico provocará un retroceso para la educación y generación de talento. Lo que a largo plazo provocará menos crecimiento económico para el país.