El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ofrece una pensión a todos sus derechohabientes que cumplan con el número de semanas cotizadas, aparte de otros términos y condiciones, pero qué sucede si una trabajadora o un trabajador se queda sin empleo, a continuación te decimos lo que ocurre bajo esa circunstancia.
De acuerdo con el Seguro Social, los derechohabientes pueden acceder a las siguientes pensiones: por cesantía en edad avanzada o vejez, viudez, invalidez, orfandad, incapacidad permanente y por retiro, según lo que establece en la Ley Federal del Seguro Social. Todos estos apoyos cuentan con un incremento periódico, de acuerdo con el índice Nacional del Consumidor.
¿Qué pasa con mis semanas cotizadas si dejo de trabajar?
En México durante julio de 2022, según datos del Inegi, hubo una tasa de desempleo del 3.4 por ciento y hasta 31.8 millones de personas laboraron en el sector informal, de ahí que muchos se pregunten qué sucede con las semanas cotizadas en el IMSS cuando un derechohabiente pierde su empleo o no encuentra uno dentro del sector formal.
Para tal caso, el IMSS otorga el llamado tiempo de gracia, es decir, el tiempo que se puede reclamar el derecho a pensión y sin estar cotizando. De acuerdo con la Ley del Seguro Social, las trabajadoras y los trabajadores cuentan con "una cuarta parte del tiempo cubierto por sus cotizaciones".
Te podría interesar
Por ejemplo, si una persona cuenta con mil semanas cotizadas, posee un tiempo de gracia de 250 semanas para reclamar los derechos que le pertenecen, sobre todo las pensiones. Para conocer la cantidad de semanas, los derechohabientes pueden solicitar una constancia de semanas cotizadas, donde viene la fecha de vencimiento para conservar derechos.
¿Cómo tramitar una constancia de semanas cotizadas ante el IMSS?
A través de las ventanillas de las subdelegaciones del IMSS o de manera digital, las trabajadoras y trabajadores pueden obtener su constancia de semanas cotizadas; es importante que las personas tengan a la mano los siguientes datos personales: CURP, Número de Seguridad Social (NSS) y correo electrónico.
Para conservar sus derechos ante el IMSS, incluyendo el acceso a una pensión, las personas no deben de estar más de tres años sin cotizar. El Seguro Social recuerda que el acceso a este beneficio no sólo se da a partir de las semanas cotizadas, sino de que los derechohabientes cumplan nuevos beneficios.