Hoy te diremos cuál es el mejor veneno para combatir cucarachas chiquitas, según un manual publicado por el Instituto de Agricultura y Recursos Naturales de la Universidad de Nebraska-Lincoln.
Recuerda poner atención al contenido que tenemos para ti sobre hogar, como el texto donde abordamos el truco casero para eliminar cucarachas con palomitas de maíz.
¿Cuál es el mejor veneno para acabar con las cucarachas chiquitas?
De acuerdo con el Manual para el Control de Cucarachas de la Universidad de Nebraska, hay unas sustancias llamadas desecantes que afectan a estos insectos.
“Los desecantes matan a las cucarachas al destruir una capa cerosa que protege sus cuerpos. Los tres desecantes de control más eficaces son la tierra diatomácea, el gel de sílice y ácido bórico”, indicó el recinto educativo.
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En este sentido, puedes valerte de estas tres sustancias para hacerle frente a una plaga que tengas en tu casa o negocio. ¡Entre más rápido actúes, mejor!
La tierra diatomácea proviene de los restos de la cáscara de los diatomos de sílice fosilizada, que son animales microscopios del mar; el gel de sílice es una sustancia químicamente inerte que no es abrasiva y el ácido bórico deriva del bórax.
Si vas a usar alguno de estos productos te recomendamos hacerlo en pequeñas cantidades, distribuidas en varias aplicaciones a lo largo y ancho del sitio afectado.
Recuerda tener precauciones para no ingerir estos compuestos por la vía oral o respiratoria, pues podrían causarte reacciones alérgicas de moderadas a graves.
¿Cuál es el ciclo de vida de una cucaracha?
De acuerdo con el Gabinete Técnico de Sanidad Ambiental de España, las cucarachas pueden vivir de 1 a 2 años. En ese tiempo, pasan del huevo al estado de ninfas y después a la adultez.
Uno de los detalles que más asombra de su estructura corporal es su resistencia, pues pueden vivir hasta 1 mes sin comida y andar como si nada tras perder la cabeza.
Para vivir y desarrollarse favorablemente las cucarachas necesitan agua, comida, refugio y calor. Es por eso que no es raro que invadan nuestros espacios, pues como humanos les proporcionamos dichos entornos.
Otro detalle es que, pese a sus cualidades, no soportan los cambios bruscos de temperatura. En ese sentido, les resulta difícil sobrevivir en entornos que superan los 46 grados Celsius o que son menores a 7 grados Celsius.
Así que ya lo sabes: puedes apoyarte de los cambios en el clima y de venenos como el bórax, la tierra diatomácea y el gel de sílice para combatir a las cucarachas pequeñas, según lo explicado por la Universidad de Nebraska-Lincoln.
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