El frijol es la base de la alimentación de los mexicanos, pero también de otros países de América Latina. No solo es favorito por su accesibilidad, sino porque es el fiel acompañante para una gran variedad de platillos, y ni hablar de su delicioso sabor, ya sea que los comamos fritos, de la olla o en cualquier otra versión que prefieras.
Sin embargo, y pese a su popularidad, estamos casi seguros que poco conoces sobre cuál es la etimología de la palabra “frijol”. Y aunque tal vez no te lo has preguntado, a continuación te explicaremos un poco más sobre el origen de este vocablo, y te advertimos, quedarás sorprendido cuando descubras que no es tan mexicano como creías.
¿Cuál es el origen de la palabra “frijol”?
Primero hablemos sobre la historia del frijol. Según explican expertos del Diccionario Enciclopédico de la Gastronomía Mexicana, el frijol es originario de América y fue domesticado en Mesoamérica hace alrededor de siete mil años.
La importancia de este alimento no es nueva, pues desde la época prehispánica, ya era de los elementos principales en cualquier cocina, además que se entregaba como tributo a los mexicas.
Te podría interesar
Ahora, ¿cuál es el origen de la palabra “frijol”? Y pues como suele ocurrir con muchas otras cosas, hay varias versiones. La primera, replicada por el sitio etimologías.dechile, explica que este vocablo es una deformación del español antiguo “frisol”, que a su vez, proviene de la palabra catalana “fesol” y se originó del latín “phaseolus”. ¿Nos explicamos?.
Esta última palabra proviene del idioma griego, que se podría definir como un tipo de legumbre, lo que tendría muchísimo sentido.
La segunda teoría indica que la palabra “frijol” se origina del Náhuatl, “etl”, que significa frijol. Aunque también se dice que proviene del término que utilizaron los italianos, que era “fiesole”, y después terminó adaptándose al frijol de hoy.