Testimonios desgarradores son lo que se escuchan a lo largo del país por parte de madres de familia que son violentadas a través de sus hijos. La violencia vicaria, como se le conoce a este tipo de violencia de género, trastoca la tranquilidad de las mujeres y en marco del Día Internacional de la Mujer, llaman a la reflexión.
Desde intentos de feminicidio, secuestro, manipulación, chantaje y agresiones tanto verbales como físicas, las mujeres se ven expuestas a parejas manipuladoras que aprovechan el amor materno para provocar dolor y lastimar el corazón de familias enteras. Desde Monterrey, Guadalajara, Nogales y Torreón, las víctimas expusieron sus casos para generar consciencia y elevar la voz.
Yetlanezy, es una mujer a quien su expareja amenazó en distintas ocasiones, el caso llegó al grado de que incluso pisó la prisión en la frontera de Sonora.
“Incluso yo estuve en prisión en Nogales, fue supuestamente por incumplimiento de obligaciones familiares”.
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En otra ocasión, fue abordada por hombres armados quienes provocaron severos daños en su automóvil.
“Cuando yo iba entrar a mi casa me chocan, se van con toda la velocidad del universo y me chocan para que yo no entre a la casa y ya cuando me chocaron se baja el señor super enojado y me empieza a decir que me bajara del auto, que yo traía una orden de aprehensión y que me iban a llevar”.
Otro testimonio es el de Andrea Sahagún, una mujer de Jalisco quien considera que las agresiones escalan al grado de que muchas mujeres han contemplado la posibilidad de atentar contra su propia vida ante la desesperación de no poder ver a sus hijos.
“Es una de las violencias más agresivas, incluso yo podría denominarlo como una antesala al feminicidio, porque es una forma de violencia en la que puedes inclusive llegar a tomar el camino fácil que sería el suicidio”.
Andrea a padecido consecuencias en su salud y asevera que son daños irreversibles.
“En mi caso por ejemplo, tengo incluso problemas de salud, problemas de sueño, estrés, todo esto a partir de que todos lo días me levanto pensando si hoy será el día en que vengan patrullas y abran mi casa y se la lleven”.
Es mediante la manipulación hacia los hijos como muchos hombres agreden a las madres. Por ejemplo, los hijos de Perla, eran incitados por su padre en Monterrey, Nuevo León para grabar a su mamá y exhibirla en situaciones comprometedoras y engañosas.
“Mi papá este tiempo me hace hacer cosas a tus espaldas, me dice que te va demandar porque la casa donde él vive se fue a rentar una casa, nos acondicionó la recamara, nos compra cosas y nos dice que si le damos grabaciones tuyas o provoquemos por ejemplo, que te enojes, y que nos grites, que yo lo grabe sin que te des cuenta y que yo le envíe las grabaciones”.
La situación también escaló hasta afectar gravemente su salud emocional y física.
“Empecé con ataques de pánico, una secuela de parálisis facial, esto es un daño de verdad irreversible, es una de las violencias más fuertes que una como mujer está siempre con el miedo de que te puedan arrebatar a tus hijos”.
Aunado a todo lo anterior, Jackelín, otra mujer víctima de violencia vicaria en la ciudad de Guadalajara, cumple casi un año sin encontrarse con sus hijos, ya que cayó en el engaño de enviar a sus pequeños de vacaciones con su papá, quien no se los devolvió.
“Desde el 2015 ha sido un martirio porque siempre él venia de vacaciones o yo le mandaba a mis hijos, y mi hija llegaba, de que, mi papá me dijo que tu no nos dejas verlo, hablándole mal de mi y de mi pareja”.
En marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, el Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria, celebra que se estipule el término en las leyes y se tipifique como delito, sin embargo consideran que hay tareas pendientes y deben visibilizarse los casos para evitar que más mujeres sean sujetas a dicha situación.