La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, cuestionó este lunes a la empresa Google por respaldar el uso del término "Golfo de América" en sus mapas de Estados Unidos, tras una orden del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Durante su conferencia en Palacio Nacional, Sheinbaum mostró una carta que la empresa tecnológica envió el 10 de febrero al canciller Juan Ramón de la Fuente, en la que argumenta que la modificación sigue una actualización del Sistema de Información de Nombres Geográficos de Estados Unidos (GNIS, por sus siglas en inglés) tras el decreto firmado por Trump el 20 de enero.
"Pero esto está mal, como lo he dicho muchísimas veces, el decreto del presidente Trump le cambia el nombre a ‘Golfo de América’ solo en su plataforma continental, estamos hablando de 22 millas náuticas desde la costa. No a todo el Golfo", destacó la mandataria.
Critica cambio al Golfo de América
Sheinbaum criticó que Google haya extendido el nombre "Golfo de América" a la plataforma continental de México y Cuba, lo que, a su juicio, excede lo establecido en la normativa estadounidense. Advirtió que, si no recibe una respuesta satisfactoria, México llevará el caso a instancias legales.
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"Google no tiene derecho a renombrar la plataforma continental de México, no tiene ningún derecho, ni a la plataforma continental de Cuba, porque está dividido entre los tres países el Golfo de México", declaró.
La polémica escaló la semana pasada cuando usuarios en Estados Unidos detectaron que los mapas de Google y Apple ya mostraban la nueva denominación en ese país. Sheinbaum reiteró su inconformidad con la respuesta de Google a la carta que ella envió el 30 de enero a su CEO, Sundar Pichai, exigiendo la corrección de esta designación errónea.
Además, la mandataria exhibió una misiva del canciller De la Fuente, fechada el 11 de febrero, en la que el Gobierno de México rechaza cualquier intento de renombrar zonas geográficas que incluyan su territorio.
En el documento se exige que la referencia a "Golfo de América" se limite exclusivamente a la jurisdicción estadounidense, advirtiendo que, de no corregirse, México tomará las medidas legales necesarias.