La violencia en Chiapas ha alcanzado niveles alarmantes debido a la intensificación del conflicto entre los grupos criminales liderados por Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’, y los ‘Chapitos’, hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán. Esta guerra ha dejado una estela de muerte, miedo e incertidumbre entre las y los habitantes de la región.
En medio de los enfrentamientos, más de 12 mil personas han abandonado sus hogares en busca de seguridad. Muchos de ellos han huido hacia Guatemala, en un éxodo que refleja la desesperanza que se vive en Chiapas.
Los habitantes, temerosos de caminar por las calles cercanas a sus hogares, han optado por dejar atrás sus comunidades, en las que la violencia parece no tener fin.
La situación es tan grave que más de 300 mil estudiantes de preescolar, primaria y secundaria no regresaron a clases al inicio del ciclo escolar 2024-2025.
Te podría interesar
Además del desplazamiento forzado, se ha reportado que la violencia está obligando a algunos pobladores a unirse a las filas del narcotráfico.
¿Cuándo comenzó la guerra en Chiapas?
De acuerdo con información de la organización InSight Crime, la violencia en Chiapas se incrementó de manera considerable desde el año 2021, cuando el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) llegó a municipios fronterizos antes dominados por el Cártel de Sinaloa.
Con el paso del tiempo, estos grupos criminales comenzaron a aliarse con otros más pequeños, lo que ha fortalecido y ampliado su dominio.
“Para continuar luchando, los grupos criminales están recurriendo a civiles para que apoyen o se unan a sus ejércitos criminales y ejercen su violencia contra quienes se niegan”, explica InSight Crime.
Por ejemplo, en mayo de este año, hombres armados perpetraron una masacre en Nuevo Morelia, una comunidad de Chicomuselo, donde asesinaron a 11 personas, incluyendo a dos líderes religiosos.
Las víctimas habían hecho un llamado a la paz y se habían rehusado a respaldar a cualquiera de los dos grupos criminales que se disputan el control de la región.
Así obligan a pobladores a volverse narcos en Chiapas
Una persona defensora de derechos humanos detalló de forma anónima a InSight Crime que la población civil está sufriendo las consecuencias “porque prácticamente ha sido tomada como rehén”.
La población “está siendo forzada a colaborar con uno u otro de los grupos criminales”. Muchas personas han querido abandonar sus comunidades para evitar el reclutamiento forzado; sin embargo, les dijeron que si se iban, los matarían.
Sumado a ello, en varios municipios, hombres armados han 'acorralado' a los residentes para obligarlos a participar en bloqueos de carreteras y con ello impedir el avance de grupos rivales y también de las fuerzas de seguridad.
Los grupos criminales no solo obligan a las personas a integrarse a sus filas para cometer actos criminales, también para apoyar sus operaciones delictivas cotidianas, es por ello que buscan a electricistas, torneros, plomeros, recaderos y otros trabajadores.
Según InSight Crime, todo esto ocurre ante los ojos de las autoridades locales, quienes muchas veces son cómplices del terror que se ha instalado en varias comunidades de Chiapas.
¡Sigue a Grupo Fórmula en X!