Lo más común es que se vaya la luz cuando hay lluvias o vientos fuertes, debido a que estos fenómenos pueden derribar el cableado o hasta los postes por donde circula la energía, ¿pero por qué se ve la luz cuando hace mucho calor? A continuación te decimos cuáles son los motivos y si se puede dar con frecuencia.
Apenas ayer, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) decretó un estado de emergencia en el sistema eléctrico nacional a causa de la segunda ola de calor, debido a que la elevada demanda de energía puso en entredicho la "seguridad y confiabilidad" de toda la red a nivel nacional, por lo que hubo una serie de apagones en varios estados del país.
¿Por qué se va la luz cuando hace mucho calor?
La luz se va cuando hace mucho calor a causa de la alta demanda existente por el uso de sistemas de refrigeración y ventilación, tanto a nivel doméstico como industrial, de acuerdo con lo que explicó Gonzalo Monroy, especialista de GMEC, en una entrevista concedida a José Cárdenas para Radio Fórmula.
Las ondas de calor subieron la refrigeración, subieron los aires acondicionados, más demanda eléctrica y el sistema no tenía con que cubrirlo", concluyó Monroy.
De acuerdo con Monroy, el sistema eléctrico mexicano no alcanza a cubrir esta elevada demanda eléctrica, por lo que pueden existir desde intermitencias y hasta apagones en toda la red. Esto ya ha ocurrido en otras ocasiones, por ejemplo, en la ola de calor de junio de 2023 estuvieron "a punto de apagar las luces", confesó.
A esto se le suma el bajo nivel que tienen las presas mexicanas por la escasez de lluvias: Monroy explicó que hasta el 10 por ciento de la energía del país se genera a través de plantas hidroeléctricas -cuyas turbinas usan la fuerza del agua para generar energía-; inclusive, dijo que varias de estas fuentes de agua están a un nivel del 17 por ciento.
¿Por qué debe existir una reserva en el sistema eléctrico?
Dentro del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), de acuerdo con el Gobierno de México, debe existir una reserva operativa "que permita en cualquier instante mantener la frecuencia, a fin de evitar la afectación en los centros de carga ante la ocurrencia de la contingencia sencilla más severa"; tal margen nunca debe ser inferior al 6 por ciento.
En resumidas cuentas, el SEN siempre debe tener este 'guardadito' para garantizar la funcionalidad de los sistemas de carga, cuya principal función es distribuir el suministro eléctrico a toda la red. Si éstos no cuentan con la capacidad suficiente para funcionar, no racionan la electricidad y se pone en riesgo toda la red.
Durante las olas de calor, como afirma el especialista, el consumo aumenta a causa de que se usan más sistemas de ventilación y se aumenta la potencia de los refrigeradores. Esto hace que la cantidad de energía que se usa sea mayor y no exista tal reserva, por eso, se hacen una serie de cortes al suministro y así garantizar que la red no colapse.