La sierra de Guerrero se mantiene asediada por el crimen organizado, principalmente por La Familia Michoacana. Las extorsiones y los ataques con drones se han vuelto en una constante para sus habitantes y ahora hasta les cobran un impuesto a los pobladores por habitar en las casas que ellos mismos construyeron.
Una investigación del equipo de Azucena Uresti para Milenio reveló que los habitantes de Petatlán y Zihuatanejo, municipios vecinos, son obligados a pagar una cuota de 70 pesos diarios por permitirles vivir en sus casas, lo que ha provocado que abandonen sus casas porque ya no pueden darles ese dinero.
Los habitantes de ambos municipios identificaron que La Familia Michoacana es el grupo criminal que está detrás de las extorsiones; pues denunciaron que en caso de que no paguen los atacan a balazos o con drones cargados con explosivos, como ha ocurrido en comunidades de San Miguel Totolapan y Heliodoro Castillo.
Además, los habitantes, principalmente hombres jóvenes, también son reclutados de manera forzada por el grupo criminal o los secuestran y los obligan a trabajar, para liberarlos les piden el pago de 20 mil pesos a sus familias y si no los entregan los forzan a volverse sicarios.
Te podría interesar
Asimismo, obligan a los habitantes a consumir productos que comercializan los distribuidores que trabajan para ese grupo criminal y controlan los precios de varios productos, como el huevo, el pollo, la tortilla, el material de construcción y el ganado. Algunos pobladores acusaron que acudieron a Chilpancingo y a Acapulco para pedir ayuda de las autoridades desde noviembre de 2023, pero no les han hecho caso.
Esto sucede pese a que Petatlán y Zihuatanejo colindan con los municipios de Guerrero que forman parte de la región de Tierra Caliente, donde se reforzó la seguridad desde el pasado 10 de enero con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por acuerdo de los gobernadores de Morelos, Estado de México, Guerrero y Michoacán.
Los pobladores también denunciaron que pese a que hay bases militares en La Palma, una de las comunidades de Petatlán, los criminales han saqueado casas.
¿Qué ocurre en Guerrero y por qué a La Familia Michoacana le interesa?
El último suceso violento que se registró en Guerrero y que fue atribuido a La Familia Michoacana, según Quadratín, fue el secuestro de un grupo de 9 hombres en el municipio de Buenavista de Cuéllar.
Las víctimas son Israel 'N', Juan Manuel 'N', Carlos 'N', Emanuel 'N', Rubén 'N', José Manuel 'N', Alfredo 'N', Rodolfo 'N' y Santiago 'N', quienes se encontraban en una fiesta el 13 de enero pasado cuando un comando armado ingresó y se los llevó, según la Fiscalía General del Estado.
La dependencia desplegó un operativo de búsqueda, pero no los han localizado. Este secuestro se agrega al de los 12 trabajadores de limpia de Taxco de Alarcón que fueron privados de su libertad entre el 25 y 26 de diciembre. De ese grupo, sólo cuatro empleados fueron liberados y el resto permanecen secuestrados.
Otros hechos que conmocionaron a la población de Guerrero fue la masacre que se registró en Buenavista de los Hurtado, localidad de Heliodoro Castillo, el 4 de enero y que provocó la muerte de cinco personas; así como el ataque contra los asistentes de un palenque en Petatlán que dejó a cinco personas sin vida y 20 heridos, según la Fiscalía.
Sobre la violencia perpetrada por La Familia Michoacana en la sierra de Guerrero, el sacerdote Filiberto Velázquez, director del Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia Minerva Bello, explicó en entrevista para Grupo Fórmula que ese grupo criminal mantiene una disputa con Los Tlacos en los municipios de Heliodoro Castillo y San Miguel Totolapan porque es una zona rica en minerales, hay oro y plata, así que buscan controlar a las empresas trasnacionales que intenten explotar la región.
Asimismo, pretenden imponer a sus candidatos para las próximas elecciones y establecer a quien va a gobernar los Ayuntamientos según lo que les convenga. El activista detalló que La Familia Michoacana también busca desplazar a Los Tlacos en el cobro de extorsiones y en el control de los precios y mercancías en la sierra de Guerrero.