Santiago Nieto, encargado de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH), informó que emitieron 21 órdenes aprehensión contra integrantes de una banda criminal identificada como "Los hijos del diablo", que se dedican a extorsionar a transportistas de la línea de autobús México-Tizayuca mediante el cobro de derecho de piso. De éstas, seis se cumplimentaron en el Estado de México y dos en Hidalgo el martes pasado, aunque aún quedan 13 pendientes.
"Es una banda que opera desde la Gustavo A. Madero, [en Ciudad de México] hasta Tizayuca, [en Hidalgo], pasando por Tecámac, Zumpango y Ecatepec, [en el Edomex], que extorsiona y priva de la vida a conductores por el pago de derecho de piso", señaló en entrevista con Óscar Mario Beteta "En los tiempos de la Radio".
Nieto consideró que las detenciones de ayer significaron un golpe importante y detalló que el grupo está encabezado por personas que formaban parte de corporaciones policiales. El funcionario destacó que a través de esta operación buscan garantizar la seguridad de usuarios, transportistas y conductores, y destacó que es una zona que está en desarrolló económico.
La línea de autobús México-Tizayuca suspendió el servicio de transporte el pasado 6 de septiembre porque uno de sus conductores fue asesinado por cuatro sujetos en la autopista. El presunto agresor fue detenido el 8 de septiembre en el municipio de Nezahualcóyotl, en el Edomex.
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A pesar de esto, la línea de autobús mantuvo suspendido el servicio de transporte hasta el martes pasado, es decir durante 6 días no brindó el servicio y esto provocó una severa afectación a los usuarios que todos los días viajan de Hidalgo a la Ciudad de México; pues son los camiones que principalmente ofrecen ese traslado.
Así que el Ayuntamiento de Tizayuca tuvo que ocupar varios vehículos oficiales para trasladar a los usuarios de la línea de autobús a otras centrales de autobuses que sí están prestando el servicio, como ODT y Baltazar.
Tras el homicidio del conductor, el resto de los transportistas de la línea México-Tizayuca dijeron que iban a analizar la posibilidad de realizar un nuevo paro de labores y bloqueo de la autopista para exigir seguridad, como sucedió el 1 de septiembre. Ese día cerraron la circulación durante 9 horas bajo esa demanda.
Los transportistas acusaron que después del bloqueo sólo les asignaron una unidad de vigilancia que realizaba recorridos con los autobuses de forma intermitente. Ese no fue el primer bloqueo que los conductores realizaron, la primera vez que cerraron fue el 30 de agosto después de que criminales quemaron una unidad de la misma línea de camiones.
Además, la alcaldesa de Tizayuca, Susana Ángeles, acusó en entrevista para Grupo Fórmula que la inseguridad a la que se enfrentan los conductores, como el cobro de extorsiones, ocurre desde 2014 y no ha sido atendida por el gobierno de la entidad.