Luego de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) abandonara definitivamente México ante una constante opacidad por parte de las autoridades para esclarecer el caso los 43 normalistas de Ayotzinapa.
Iñaki Blanco, quien se desempeñaba como fiscal de Guerrero durante la desaparición de los estudiantes, negó que su administración obstaculizara el acceso a la verdad en el caso.
“Está debidamente documentado que se detuvo y consignó 33 personas en calidad de autores materiales e intelectuales” vinculados al crimen de Estado, dijo en entrevista con Ciro Gómez Leyva.
Recalcó que en septiembre de 2014 se logró rescatar a 68 jóvenes, se detuvo a mandos de la policía municipal y a integrantes de Guerreros Unidos.
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Exfiscal de Guerrero: “El GIEI miente”
Blanco, aseguró que el informe presentado el pasado 25 de julio pretende desprestigiar a su persona, como exfuncionario que encabezó las primeras indagatorias de Ayotzinapa.
“La aparente manipulación y ocultamiento de material probatorio relativo del C4 es absolutamente falso”, señaló sobre el informe de GIEI.
Aseguró que “Otra cosa en la que el GIEI miente” es en los señalamientos relativos a cómo se consiguieron los datos de la participación de los elementos bélicos y su detención alrededor de la desaparición.
“Fue la Fiscalía quien logró determinar la identidad de la totalidad de este grupo de reacción inmediata, incluso destaco que de los 22 detenidos, 12 eran bélicos”, dijo.
Consideró que los señalamientos sobre el caso “deben valorarse de manera integral y profunda” desde una visión de parcialidad.
¿Qué dijo el GIEI del caso Ayotzinapa?
Durante su sexto y último informe el GIEI reveló que autoridades de todos los niveles estuvieron implicadas en la tortura y desaparición de los estudiantes que fueron secuestrados por el grupo criminal Guerreros Unidos el 26 de septiembre de 2014.
Los peritajes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) confirmaron el protagonismo del Ejército esa noche, entre ellas el control de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) de las comunicaciones tanto del crimen organizado como de las víctimas. Otras corporaciones como la Marina también fueron señaladas de perpetrar torturas que abonaron a la llamada verdad histórica del caso Ayotzinapa.