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‘Para la 4T vivir con VIH es un trámite’: Pacientes enfrentan obstáculos para acceder a la salud

Las personas con VIH enfrentan un retroceso en el acceso a la salud. El desabasto de medicamentos y la obstaculización para recibir atención médica son algunos de los problemas que viven cada día en todo el país.

Las personas con VIH enfrentan varios obstáculos para acceder a medicamentos y atención médica a nivel nacional.Créditos: Daniela Mena/ Grupo Fórmula.
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En México, las personas que viven con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) se enfrentan al desabasto de medicamentos y a la obstaculización de las instituciones para acceder a la atención médica, derivada de la serofobia. Lo que les impide ejercer su derecho a la salud.

Lo que se ha agravado durante la administración actual y que se refleja en un retroceso en el estado de salud de los mexicanos y mexicanas que tienen VIH. Lo que muchas veces provoca que pierdan la vida.

Durante 2021 se registraron 4 mil 662 decesos relacionados con el VIH-SIDA, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). De estos, el 83.6 por ciento, es decir 3 mil 896, fueron hombres y 16.4 por ciento, es decir 766, a mujeres.

Por lo que durante ese año, la tasa de mortalidad fue de 3.7 por cada 100 mil habitantes. Sin embargo, fue de 6.3 en el caso de los hombres y de 1.2 en el de las mujeres.

Alaín Pinzón, director de VIHve Libre, detalló en entrevista con Grupo Fórmula que desde que empezó la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador se han enfrentado al desabasto de medicamentos para el control de VIH, principalmente en las instituciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Los antirretrovirales son los medicamentos que se utilizan para controlar el virus, debido a que impiden que se multiplique por todo el cuerpo.

Yair, un paciente de la Unidad de Medicina Familiar 120 del IMSS, reportó este 26 de enero que hay desabasto de Tenofovir, un medicamento antiviral que se utiliza para tratar el VIH y la Hepatitis B. 

“Pasé con el director y me dice que no hay, que no hay en ningún lado, que no hay en la delegación norte y que van a ver de dónde lo sacan, pero yo creo que va a haber otros casos de pacientes que se van a quedar sin medicamento. No sé si sea lo mismo con retros [antirretrovirales]”, contó.

Alaín también acusó que los insumos de salud sexual, como condones y lubricantes, tampoco llegan a tiempo a los estados como Chiapas y Veracruz.

“La compra de medicamentos para este año y para el siguiente año va tarde como siempre. Llevamos cuatro años de esta administración y desde el día uno hemos tenido que pelear por nuestro derecho a la salud”, manifestó.

Las personas con VIH no son las únicas que se enfrentan al desabasto de medicamentos, sucede lo mismo con quienes tienen cáncer o diabetes. “Parecería que este gobierno quiere extinguir a las personas con enfermedades crónicas”, añadió.

Personas con VIH también viven obstaculización para recibir atención médica

El desabasto de medicamentos no es el único problema que enfrentan quienes viven con VIH. Alaín Pinzón señaló que otro problema grave que enfrentan es la obstaculización de las instituciones para acceder a la atención médica. 

Esto se debe a que el Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH y el SIDA (Censida) para prohibir que aquellas personas que sean derechohabientes del IMSS o del Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) reciban atención médica en los Centros Ambulatorios para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS) y en las Clínicas Condesa.

“Lo que está generando es un problema más grave porque si en este momento no tengo trabajo y me atiendo en la Clínica Condesa o en el CAPACIT y hoy consigo un trabajo asalariado en donde me ofrecen seguridad social, lo único que va a hacer este cambio es que el día de mañana yo llego y lo primero que me van a decir es: ‘tú ya tienes Seguridad Social no te vamos a poder dar medicamentos’”, expresó.

En este sentido, el director de VHIve Libre detalló que las Clínicas Condesa ha sido flexible porque su personal es consciente de que los usuarios necesitan tomar el medicamento todos los días.

No obstante, en los CAPACITS y en las jefaturas del programa Censida de otros estados sí se presenta la obstaculización, como Veracruz, el Estado de México Colima, Yucatán, Quintana Roo, Nuevo León y Tamaulipas.

“Es muy grave que el Censida que se supone se tiene que dedicar a cuidar y proteger el derecho a la salud de las personas que vivimos con VIH mande documentos en donde prohíbe a los centros, como los CAPACITS, para que no atiendan a personas con derechohabiencia”, añadió.

Además, la situación se agrava porque en el IMSS la burocracia provoca que el proceso para entregar los medicamentos se alargue y puede demorar varios meses en permitir que una persona con VIH acceda al tratamiento.

“En este momento tenemos personas que han suspendido su tratamiento por este cambio administrativo hasta siete meses. Y entonces el tener derechohabiencia y un nuevo trabajo, una oportunidad laboral, se traduce en una pesadilla en este país”, resaltó.

VIHve Libre recibió un caso de un hombre con VIH que se encuentra encarcelado en un Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) y le negaron la entrega de medicamentos. Ello, debido a que su cónyuge consiguió un trabajo y le ofrecieron seguro social, así que también lo dio de alta, pero en la prisión le informaron que si quería continuar con la atención médica tenía que darse de baja al IMSS.

Clínicas Condesa son las únicas aliadas de las personas con VIH

Las personas que tienen varios años en tratamiento para controlar el VIH y recién se afiliaron al IMSS son condicionados a realizarse estudios por los médicos para confirmar que tienen el virus, de acuerdo con Alaín.

El proceso de entrega de resultados en los hospitales suele ser largo y mientras los médicos resuelven si darle o no el tratamiento a los pacientes, estos no tienen acceso a medicamentos.

En el ISSSTE también hay desabasto de medicamentos; sin embargo, la dependencia sí se preocupa por ayudar a los pacientes con VIH y resolver cualquier inconveniente que se pudiera presentar.

Alaín afirmó que las Clínicas Condesa son las únicas aliadas de las personas con VIH en la administración actual porque ahí pueden acceder a atención médica trabajadoras sexuales, hombres y mujeres en situación de calle, derechohabientes del IMSS o ISSSTE y quien lo necesite.

El trabajo de Andrea González Rodríguez ,directora de la sede ubicada en la alcaldía Cuauhtémoc, y de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México han tenido resultados importantes.

Igualmente destacó que hay un trabajo colaborativo entre organizaciones y autoridades, lo que no han encontrado en la Secretaría de Salud federal.

¿Qué pasa si las personas con VIH no toman medicamento?

El tratamiento para VIH no elimina el virus del cuerpo, lo único que hace es controlarlo mediante la reducción de la carga viral. Actualmente, aún no existe una cura para el VIH-SIDA.

La mayoría de las personas puede controlarlo en un plazo de 6 meses a partir del inicio de la toma de medicamento, de acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).

El medicamento tiene que tomarse todos los días para tener resultados y evitar que las personas con VIH desarrollen el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), enfermedad provocada por el virus.

Si las personas que tienen el virus se saltan el tratamiento algunos días aumentan las posibilidades de que el virus se multiplique y debilite el sistema inmunológico. Lo que puede derivar en el desarrollo de una enfermedad.

Personas con VIH enfrentan retroceso en el acceso a la salud

El panorama para las personas con VIH en México “es gris”, apuntó Alaín. Esto se debe a que al desabasto de medicamentos y la obstrucción para recibir atención médica se añade la falta de insumos preventivos a nivel nacional.

Los insumos preventivos son PREP (profilaxis previa a la exposición), es una pastilla que se recomienda para personas que aún no tienen VIH, pero tienen riesgo de contraerlo y se debe consumir todos los días. 

El otro es PEP (profilaxis post-exposición) y se utiliza en situaciones de emergencia, cuando una persona estuvo expuesta a un contagio de VIH. Se debe tomar dentro de las 72 horas posteriores a la exposición.

Aunque la Secretaría de Salud federal asegura que hay en todo el país, el director de VIHve Libre aseguró que no es así y por lo tanto es difícil conseguirlos. Aunado a que en los CAPACITS no te lo dan si fuiste víctima de abuso sexual y no realizaste la denuncia correspondiente ante el Ministerio Público.

La falta de PREP y PEP en instituciones públicas provoca que las personas se acerquen a activistas y organizaciones, como VIHve Libre, con mayor frecuencia para pedir apoyo y orientación.

“¿Dónde está el Estado y dónde está la transformación que dijeron que iba a llegar a ser? Pues no existe”, reclamó.

Alaín resaltó que no hubo una transformación, sino un retroceso en materia de salud y en materia de VIH. “Para esta administración vivir con VIH es un trámite administrativo”, sostuvo. 

El director de la organización consideró que este retroceso responde a la serofobia que hay a nivel institucional, es decir a la discriminación y estigma sin fundamento hacia las personas con VIH. Por último, indicó que cualquier persona que necesite ayuda puede acercarse a VIHve Libre a través de cualquiera de sus redes sociales.