Petróleos Mexicanos (Pemex) respondió a los señalamientos hechos por la Secretaría de Medio Ambiente de Nuevo León con respecto a la refinería de Cadereyta, a la cual acusan de realizar emisiones "ostensiblemente contaminantes" y generar hasta el 90 por ciento del dióxido de azufre presente en el área metropolitana de Monterrey.
A través de un comunicado emitido la noche de este domingo, Pemex afirmó que las operaciones se realizan de manera segura y que las columnas de humo que alarmaron a la Secretaría del Medio Ambiente, eran vapor de agua y fueron producidas por una maniobra conocida como 'paro seguro'.
La paraestatal explicó que tal procedimiento se realiza de manera preventiva, tuvo una duración de siete minutos y las columnas de humo generadas estuvieron compuestas hasta en un 99 por ciento de vapor de agua, mientras que el 1 por ciento restante fueron remanentes de hidrocarburos, lo que les dio una coloración amarillenta.
Y es que de acuerdo con la Secretaría del Medio Ambiente de Nuevo León, el desfogue de la refinería de Cadereyta fue una muestra de las emisiones "ostensiblemente contaminantes" que realizan y hasta compartió una grabación; agregó que tales emisiones aumentan durante la noche y se propagan a toda el área metropolitana de Monterrey.
Te podría interesar
Sobre este último punto, Pemex citó las mediciones del Sistema Nacional de Información de la Calidad del Aire (SINAICA), "cuyos registros de las 14:43 horas no presentaron cambios con respecto a valores que tenían antes de la emisión del vapor", por lo que no hubo riesgos para la población, según la paraestatal.
"La refinería trabaja con toda normalidad y reitera su compromiso con la seguridad de la población local", concluyó Pemex, acerca de Cadereyta, instalaciones que pueden refinar al menos 110 mil barriles diarios y se prevé que llegue a 160 mil con las obras de modernización implementadas por la Cuarta Transformación.
En las obras de rehabilitación de la refinería de Cadereyta se instaló una planta para reducir el contenido de azufre de las gasolinas, para que pasen de 500 a 30 partes por billón. Aunado a una planta de tratamiento de aguas residuales y otra para el manejo de las aguas negras.
La Secretaría del Medio Ambiente de Nuevo León, encabezada por Félix Arratia, anunció el posible cierre de las instalaciones de la refinería de Cadereyta, pese a que están bajo la tutela de la federación. La paraestatal no se pronunció sobre tal advertencia hecha por la administración nuevoleonesa.