Un grupo de científicos y científicas descubrió el segundo agujero azul más profundo del mundo en el lecho marino de la bahía de Chetumal, en Quintana Roo. Tiene una profundidad de 274 metros bajo el nivel del mar y 13 mil 690 metros cuadrados de superficie, de acuerdo con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).
El agujero azul fue bautizado como Taam Ja’, que en lengua maya significa “agua profunda”, y el grupo científico que lo descubrió está conformado por integrantes del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) y del Centro Público de Investigación (CPI), que a su vez están coordinados por el Conacyt.
Aunque este agujero azul es el segundo más profundo, es el primero que se encuentra en un sistema estuarino, es decir, en un cuerpo de agua en los que corrientes de agua dulce de ríos se mezclan con las de agua salada del mar.
Los agujeros azules tienen menor profundidad que las fosas marinas y los abismos marinos, los cuales alcanzan 11 mil metros de profundidad, y se forman por la fracturación, disolución y colapso de suelos.
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El agujero azul más profundo del mundo se localiza en Sansha Yongle, en China. Tiene una profundidad de 300 metros bajo el nivel del mar.
De acuerdo con Conacyt, el hallazgo del agujero azul es relevante para la investigación científica marina; pues "representa una ventana para obtener información de cómo eran el ambiente y el clima hace miles de años".
De esta forma será posible contribuir a la comprensión de los procesos ambientales y geológicos, la conectividad de los acuíferos y el origen de agua de estos sistemas hidrogeológicos.
¿Cómo es el agujero azul Taam Ja'?
El agujero azul mexicano Taam Ja' tiene una superficie casi circular y abarca un área aproximada de 13 mil 690 metros cuadrados. Los lados son empinados, con pendientes de 80 grados que forman la estructura de un cono cubierto por biopelículas (ecosistema microbiano), sedimentos, piedra caliza y salientes de yeso.
Además, la boca del agujero azul tiene una profundidad de entre 4.5 y 5 metros bajo el nivel del mar, ahí las propiedades del agua cambian significativamente con gradientes de temperatura y salinidad.
La investigación del agujero azul se realizó mediante buceo, ecosondas, perfiladores CTD (conductividad, temperatura y profundidad, por sus siglas en inglés) y con la recolección de muestras de agua en septiembre de 2021.
Los científicos y científicas que hicieron el hallazgo del agujero azul fueron Juan Alcérreca Huerta, Teresa Álvarez Legorreta, Laura Carrillo, Laura Flórez Franco, Óscar Reyes Mendoza y Joan Sánchez Sánchez; así como académicos y académicas de la Unidad Chetumal de Ecosur, con la colaboración del guía comunitario Jesús Artemio Poot Villa.