La sierra de Guerrero se ha convertido en un territorio importante para distintos grupos del narcotráfico, como La Familia Michoacana. Pese a que no es un territorio estratégico para el trasiego de drogas permanece en disputa y en los últimos años también se ha vuelto en un lugar importante para la siembra de hoja de coca, de acuerdo con la investigación “NarcoFiles: El Nuevo Orden Criminal”.
El poblado de Río Santiago fue el primero en el que se detectó un cultivo de la hoja de coca en 2019, aunque fue hasta 2021 que el gobierno federal reportó el hallazgo.
Ahí, como en otras comunidades de la sierra, la actividad principal era el cultivo de café; sin embargo, la crisis que generó un hongo conocido como “La Roya” en 2014 provocó una crisis de la que ya no pudieron levantarse y la planta colombiana pareciera tener un futuro prometedor.
Información del Ejército advierte que de 7 plantíos hallados en 2021 aumentaron a 69 en 2022 y hasta mayo de 2023 subieron a 96.
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Además, los plantíos que las corporaciones de seguridad destruyen no se comparan con la cantidad de plantíos de hoja de coca que hay en Guerrero.
La investigación reveló que las localidades de Guerrero en las qué hay plantíos de hoja de coca son:
- Atoyac: Río Santiago, El Porvenir, El Limón, El Paraíso, La Pintada, El Edén, Santiago de la Unión, San Vicente de Benítez, La Soledad, El Puente, Las Juntas, San Vicente de Jesús, Los Valles, Plan Grande, Cucuyachi, San Francisco del Tibor, La Remonta, Mexcaltepec, El Salto, San Juan de las Flores, Santo Domingo, Rincón de las Parotas, San Andrés de la Cruz, Los Bajitos, Puente del Rey.
- Tecpan: El Platanillo, Los Valles, Santa Lucía, El Mameyal, El Porvenir, El Pital, Los Pitales, Letrados, Los Humedales, San Luis la Loma, Guayabito, El Porvenir.
- Coyuca: Tepetixtla, Compuertas, Cocuyachi, Pueblo Viejo. En Chilpancingo, capital de Guerrero: Buena Vista de la Salud, Jaleaca.
- Heliodoro Castillo: en los ejidos de Tlacotepec (cabecera del municipio) y en Las Ventanas.
- Petatlán: en el ejido de Corrales y en la misma cabecera municipal hacia la sierra media.
- Ajuchitlán del Progreso: en Los Fresnos de Puerto Rico.
La semillas de la hoja de coca son color marrón, son similares a los granos de arroz integral. De estas se intube una planta cuyas hojas se cortan para producir una pasta y de ahí se obtiene la cocaína. Aunque el proceso es largo, los grupos criminales obtienen más ganancias si la producen, procesan y venden.
Incluso para las personas que se dedican a la siembra puede ser un negocio más redituable que sembrar otro tipo de productos, como el café porque su precio bajó.
Las autoridades de Guerrero intentan combatir la proliferación de cultivos de hoja de coca mediante el programa Sembrando Vida, según la investigación, pero esto no ha sido suficiente debido a que durante la administración actual han aumentado las hectáreas de siembra.
¿Qué buscan los grupos criminales en la sierra de Guerrero?
Heliodoro Castillo es uno de los municipios en los que se ha localizado siembra de hoja de coca. Ahí algunas comunidades son acechadas por La Familia Michoacana, grupo criminal que los ha atacado con drones en cinco ocasiones por lo menos y esto ha causado el desplazamiento forzado de algunos habitantes, principalmente infancias y mujeres.
La sierra de Guerrero no es estratégica para el trasiego de cocaína, como lo es el puerto de Acapulco; sin embargo, los grupos criminales que intentan controlar este territorio pretenden inmiscuirse en las instituciones públicas y aprovechar los recursos que puedan, según David Saucedo, especialista en seguridad.
Ante la falta de atención de las autoridades, los habitantes de Heliodoro Castillo y de San Miguel Totolapan, otro municipio de Guerrero, se aliaron para crear su propio grupo de autodefensas al que llamaron "Pueblos Unidos por la Paz" en octubre pasado. De esta forma pretenden garantizar la seguridad de sus habitantes y proteger sus bienes.
Sobre este tema, David Saucedo consideró que la ausencia de autoridades y corporaciones de seguridad federales en la sierra de Guerrero provoca que haya un dominio criminal en la zona. Por lo que los grupos criminales pueden ejercer diferentes actividades ilícitas, como robo de transporte de carga o extorsiones a comerciantes y productores agropuecuarios.