La renuncia de Arturo Zaldívar como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) representa un acto inconstitucional y regalará al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) una designación que no le correspondía, recalcó Javier Martin Reyes, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En entrevista con Denise Marker para “Atando Cabos”, el especialista señaló que el artículo 98 de la Constitución Política refiere que los ministros deben estar 15 años en el cargo y sólo podrán renunciar ante causas graves.
“Esa renuncia de Arturo Zaldívar es abiertamente inconstitucional. Él lo sabe perfectamente porque la constitución dice causas graves, en su carta ni siquiera hace el intento por justificar las causas graves”, señaló. “El efecto más inmediato es que le regala de manera inconstitucional una nueva designación al presidente López Obrador”.
De acuerdo con la Constitución, en su artículo 98, el párrafo tercero establece: las renuncias de los ministros de la SCJN solamente procederán por causas graves, serán sometidas al Poder Ejecutivo y, si éste acepta, las enviará para su aprobación al Senado de la República.
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El futuro de Zaldívar
Tanto Martín Reyes como la constitucionalista Ana Laura Magaloni coinciden en que el exministro buscará un cargo alterno dentro del gobierno.
“Se ve que Arturo Zaldívar quiere unirse a Claudia Sheinbaum”, dijo Magaloni en entrevista también con “Atando Cabos”.
En este sentido, el especialista de la UNAM señaló que la renuncia del antes ministro otorga al presidente Andrés Manuel López Obrador una designación que debía hacerse hasta el próximo mes de septiembre y que ya no le correspondía realizar.
“El procedimiento de designación es un procedimiento que le da muchísimo poder al presidente porque manda las ternas, si el Senado se la rechaza, manda una segunda terna y si se la vuelven a rechazar, el presidente nombra directamente y López Obrador puede designar a quien quiera”, explicó el especialista.
Además, Magaloni agregó que el riesgo principal no radica en que López Obrador realice una designación que correspondía al próximo mandatario, sino que, dado el proceso, la persona que supla a Zaldívar podría ser colocada en el cargo desde el Ejecutivo.