A nueve años de que la minera Buenavista del Cobre, que forma parte de Grupo México, derramara sulfato de cobre en el Río Sonora y Bacanuchi, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) tomó la decisión de emitir una denuncia penal en contra de la empresa por no haber remediado los daños producidos al ambiente.
Elena Arengo, de Poder Río Sonora, señaló que las mineras suelen verter líquidos que ocupan en el proceso de extracción de metales directo en ríos de la zona, lo que afecta a negocios y a la salud de los pobladores del lugar.
“(Las autoridades) presentaron un diagnóstico del Río Sonora y quedó muy claro y persistente el daño al agua, al aire, a la flora y a la fauna con la presencia de metales pesados en esos elementos”, explicó en entrevista con Denise Maerker para “Atando Cabos”.
Además señaló que se han realizado estudios a los pobladores afectados, encontrando que “la sangre y la orina tenía la presencia de metales pesados por encima de las normas permitidas. Esto no es novedad para las personas del Río Sonora, quienes desde hace 9 años, vienen documentando daños en su salud, daños en la piel, gastrointestinales.”, explicó.
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Fue en agosto de 2014 que la minera Buenavista Cobre derramó el sulfato de cobre en el Río Sonora y Bacanuchi por un "mal diseño hidrológico de su sistema de Tinaja 1". Este derrame afectó los municipios de Arizpe, Banámichi, huépac, San Felipe de Jesús, Aconchi, Baviácora, Ures y Hermosillo, ante este desastre se acordó una remediación de 2 mil millones de pesos del fideicomiso "Río Sonora" de los que sólo ejecutaron mil.
A casi una década de ese suceso, la Semarnat, el Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático (INECC) y el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) realizaron 616 muestreos en el aire, suelo y biota de los lugares afectados y determinaron que rebasan los niveles permitidos.
La denuncia en contra de Grupo México señala que el "agua está contamida con mercuro" y exigió a la empresa entregar un programa de remediación ambiental que antienda al suelo, agua, flora, fauna y aire, el cual debe ser avalado por la comunidad afectada, además de autorizado y supervisado por la propia dependencia.
No hay reparación por derrame en Río Sonora
La codirectora de la organización recordó que el derrame fue de 4 mil metros cúbicos de sulfato de cobre, mismos que contaminaron 400 kilómetros tanto del Río Sonora como del Bacanuchi. “Causó daños en la economía, el agua, el aire, la salud en comunidades de ocho municipios”, detalló.
Pese a nueve años del suceso, las promesas de reparación no se han cumplido, pues Arengo explicó que de 36 plantas potabilizadoras que se prometieron, sólo se concretaron 10 y hoy en día sólo una sigue en funcionamiento. Además de que el fideicomiso que se abrió para atender los daños se cerró de forma unilateral
“La remediación que tenía que ocurrir al final no ocurrió”, señaló. “(Pedimos) que se atienda de inmediato el acceso a agua limpia y potable en las comunidades, incluyendo a los niños en las escuelas”.
Sobre la demanda de Sedema consideró que fueron los propios estudios realizados los que acreditaron la responsabilidad de la empresa en el derrame.