El mango solo aporta una elevada cantidad de agua, carbohidratos y vitaminas, sin embargo, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) descubrió que hay presentaciones de esta fruta en almíbar que podrían causar daños a la salud de las personas.
En ese sentido, la Profeco realizó un estudio en el que demuestra cuál es la peor marca de mangos en almíbar, debido a que esta contiene azúcares en exceso.
¿Cuáles son los peores mangos en almíbar?
Según la información compartida en la Revista del Consumidor, elaborada por Profeco, los peores mangos en almíbar del mercado son los de la marca Great Value, pues son el artículo de su categoría con más azúcares totales.
De acuerdo con el análisis, esta lata -que cuesta 44 pesos- tiene 22.2 gramos de azúcar por cada 100 gramos de producto (fruta y almíbar).
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En el ranking le sigue la marca La Costeña, con una lata de mangos en almíbar que cuenta con 16.5 gramos de azúcar por cada 100 gramos de producto.
Finalmente, se ubica Del Monte Quality con 11.2 gramos de azúcar por cada 100 gramos del producto.
De esta forma, la Profeco concluyó que la peor es Great Value debido al exceso de este ingrediente. La dependencia señala que la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda no ingerir más de 25 gramos de azúcares al día.
"Encontramos productos que cubren por sí solos dicha cantidad. Si bien hay algunos que pueden contener menos azúcares, su consumo junto con otros alimentos podría exceder dicha recomendación", advierte.
Recuerda que el exceso de azúcares en la dieta de las personas puede provocar enfermedades no transmisibles como los males cardiovasculares o respiratorios y la diabetes.
¿Cómo deben ser las frutas en almíbar?
El estudio realizado por la Profeco evaluó diferentes marcas de frutas en almíbar como los duraznos, las piñas y los mangos, así como otras presentaciones de frutas deshidratadas.
La autoridad señala que las latas en almíbar se obtienen a partir de frutas con un grado de madurez adecuado, sanas, frescas, limpias, previamente seleccionadas para eliminar las partes no comestibles. También deben ser envasadas en recipientes sanitarios, herméticamente cerrados y procesados técnicamente para asegurar su conservación.