El expresidente Enrique Peña Nieto se encuentra de fiesta, pues su primera hija, Paulina Peña, se casó este fin de semana con Fernando Tena. Pero, ¿dónde está el priista?
La revista ‘Quién’ dio a conocer la información acerca de la boda de Paulina Peña, la cual se habría realizado este sábado 10 de septiembre luego de que a mediados de agosto se difundió la cancelación de la celebración.
Poco se sabe de la fiesta, pues los detalles se mantuvieron en privado y únicamente hubo 30 invitados, quienes tuvieron prohibido realizar comentarios o posteos en redes sociales.
Razón por la que hasta el momento no existen fotos o videos del gran momento de la primogénita del expresidente de México.
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La boda se habría realizado en una casa ubicada en Las Lomas, Ciudad de México, propiedad perteneciente a una amiga de su fallecida madre.
¿Enrique Peña Nieto acudió a la boda de su hija?
Pese a la importancia del evento, se intuye que el expresidente de México, Enrique Peña Nieto, no acudió a la boda de su hija, pues se sabe que el priista se encuentra en España.
Cabe recordar que la Fiscalía General de la República (FGR) mantiene tres carpetas de investigación abiertas contra el priista por los delitos de carácter electoral, patrimoniales, lavado de dinero, enriquecimiento ilícito y transferencias internacionales ilegales.
Hace unos días, trascendió en el medio español El País que, antes de pedir la visa dorada, el expresidente de México intentó conseguir su residencia en dicho país por “razones excepcionales”.
Peña Nieto, quien lleva viviendo dos años en España, “llegó a solicitar una autorización de residencia por supuestos excepcionales, no previstos en el Reglamento de Extranjería”, de acuerdo con el medio.
Según fuentes familiarizadas, una persona puede obtener ‘luz verde’ a la residencia siempre y cuando existan circunstancias excepcionales de naturaleza económica, laboral o social para 'saltar' determinados requisitos del trámite en circunstancias normales.
No obstante, las autoridades españolas consideraron que el caso del priista no había ninguna circunstancia excepcional que justificara que el expresidente se saltase los 'pasos', ya que esta figura suele emplearse para beneficiar a perfiles de extranjeros muy vulnerables, afectados por enfermedad o violencia.