Si creías que las arañas violinistas era el único arácnido que debía preocuparte durante la temporada de lluvias, te equivocas, pues también es la época del año en que más predominan los alacranes, pero ¿cuáles son los más mortíferos?
Primero debes saber que de las mil 500 especies registradas, México es el país que tiene la mayor diversidad de alacranes, pues tan sólo en suelo nacional se alojan 289 especies.
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Aunque este número podría sonar un tanto abrumador, no hay mucho de qué preocuparse, ya que de las 289 especies, sólo 12 de ellas son consideradas de alta peligrosidad para la población.
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), las especies de mayor peligro pertenecen al género Centruroides, los cuales habitan principalmente en los estados de Jalisco, Morelos, Guerrero, Nayarit, Guanajuato, Michoacán, Puebla, Durango, Oaxaca y el Estado de México.
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¿Cuáles son los alacranes más mortíferos?
Entre los alacranes más peligrosos se encuentran:
- Centruroides noxius. Es difícil identificarlo, ya que presenta una coloración muy variada, los hay de tonos verdosos, negros, amarillos y hasta castaño rojizo, generalmente habitan en Nayarit y Jalisco.
- Centruroides gracilis. Es de tamaño mediano-grande, puede llegar hasta los 10 centímetros en hembras y 15 centímetros en los machos, generalmente son de color rojizo y negro, con secciones rojizas y cola negra.
Se puede encontrar en Campeche, Hidalgo, Oaxaca, Querétaro, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas Veracruz y Yucatán.
- Centruroides limpidus. Es de talla mediana entre 5.8 a 7.1 centímetros, se caracteriza por tener una coloración amarilla con variación pardo-rojiza, mientras que en la parte dorsal del abdomen tienen dos rayas longitudinales de pigmentación oscura.
Se encuentran en Michoacán, Guerrero, Estado de México, Morelos, Puebla, Oaxaca, Querétaro y Ciudad de México.
- Centruroides suffusus. La coloración del cuerpo es amarillo ocre aunque a veces puede ser parda-rojiza, en las placas dorsales del abdomen tienen dos bandas longitudinales de pigmentación oscura; también presenta manchas en la región de las granulaciones de las crestas medias posteriores y laterales anteriores.
Generalmente viven en Sinaloa, Durango y Nayarit.
- Centruroides elegans. Alcanzan entre los siete y nueve centímetros, se caracterizan por su color amarillo claro, en su carapacho tienen cuatro líneas bien definidas, en tanto que las manchas de las placas dorsales del abdomen presentan una mancha grande, negra e intensa.
Se pueden encontrar en Michoacán, Jalisco, Colima y Nayarit.
- Centruroides infamatus. Se caracterizan por su coloración amarilla, con variación parda-rojiza, las placas dorsales del abdomen son de pigmentación oscura y tienen manchas oscuras en el caparazón cefalotorácico, al igual que las patas y los pedipalpos.
Generalmente se ubican en Michoacán, Aguascalientes, Guanajuato, Durango, Jalisco, Nayarit, Zacatecas, Sinaloa y Colima.
- Centruroides sculpturatus. Tienen una longitud de entre siete y ocho centímetros, son de color amarillo con líneas oscuras horizontales en el abdomen, la cola es delgada con un telson pequeño y el aguijón tiene una curvatura muy prominente.
Se pueden ubicar en Sonora y Chihuahua.
¿Cómo identificar a un alacrán peligroso?
Según lo explicado por la UNAM identificar un alacrán peligroso de uno que no lo es bastará con observar su color, generalmente los más mortíferos son de color amarillo claro o color paja y tienen manchas oscuras en el dorso lo que le da un aspecto rayado, también hay que tener cuidado con los de color oscuro medio rojizo.
El extremo de la cola del alacrán, donde está el aguijón y el par de glándulas del veneno, puede ser útil para distinguir un posible alacrán peligroso. Los segmentos de la cola son de forma cilíndrica en los animales peligrosos, y son cúbicos en los que no lo son.
Además, los alacranes esbeltos con pinzas largas y delgadas son potencialmente peligrosos.