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SEGURIDAD

Caro Quintero ¿sí quería pagar la deuda externa? Así es el lado 'B' de la historia

Rafael Caro Quintero fue detenido en 1985 y permaneció más de 20 años en la prisión de Puente Grande, en Jalisco.

¿Es cierto que Rafael Caro Quintero ofreció pagar la deuda externa de México? Aquí te contamos.Créditos: Radio Fórmula/Sandra Ríos
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Pese a que la captura del narcotraficante mexicano Rafael Caro Quintero causó sorpresa en México y Estados Unidos, no es la primera vez que ‘El Narco de narcos’ -como también le llaman- está en prisión.

En 1985 fue detenido y permaneció más de 20 años en Puente Grande, donde fue 'vecino' de celda con Jesús Lemus, periodista mexicano que estuvo recluido tres años, durante el sexenio de Felipe Calderón, pues se le acusó de delincuencia organizada y fomento al narcotráfico.

El capo y el periodista se conocieron en Puente Grande, una de las prisiones de alta seguridad ubicada en Jalisco. A su salida, Lemus escribió el libro Los Malditos, en el que narra las convivencias que tuvo con varios reclusos, incluyendo a Caro Quintero.

Caro Quintero en Puente Grande

El 'Narco de narcos' tenía 56 años cuando estuvo con Lemus, en 2008; sin embargo, el capo ya llevaba 24 años en prisión para ese entonces, acusado del asesinato de Enrique 'Kiki' Camarena, agente de la DEA que logró infiltrarse en el Cártel de Guadalajara.

En su libro, Jesús Lemus lo describió como un preso callado que "siempre masticaba sus pensamientos y atento a lo que se mueve en su entorno".

De acuerdo con su relato, en la década de los 2000 ya no había rastro de aquel joven acusado de narcotráfico con enorme cabellera y bigote. Por el contrario -asegura el periodista- era un individuo delgado, alto y encorvado "con el peso de los años en la cárcel claramente cargado en los hombros y el pelo, aunque muy corto, tupido de canas".

Crédito: Cuartoscuro

En Puente Grande, Caro Quintero siempre estuvo bajo una estricta vigilancia del Estado por ser considerado ‘el capo más grande del narcotráfico’; en parte, por la presión ejercida por el gobierno de Estados Unidos y "la fama que le crearon los medios de comunicación".

Según Lemus, el fundador del Cártel de Guadalajara estaba seguro de que los periodistas le hicieron "más fama de la que debía", lo cual le ‘pesó’ mucho.

“Hablaron de mí hasta más no poder. Nadie se los podía impedir. Siempre pesa mucho lo que hablan los periodistas de los que estamos en prisión. Todo lo que dicen los periódicos y la televisión lo consideran los jueces al momento de tomar alguna decisión; de eso no existe menor duda”, afirmó Quintero a Lemus en aquella época.

¿Caro Quintero ofreció pagar la deuda externa de México?

Y hablando de la 'fama', Jesús Lemus no perdió la oportunidad de preguntarle a Rafael Caro Quintero si era cierto que ofreció pagar la deuda externa del país, a cambio de ser liberado y obtener un 'permiso' para realizar actividades ilícitas.

De acuerdo con el testimonio del periodista, el ‘Narco de narcos’ soltó una risa al escuchar dicho cuestionamiento y reveló que nunca dijo que pagaría la deuda externa, pues esa teoría formó parte de la 'fama' que le hicieron.

Versiones a lo largo del tiempo han señalado que Caro Quintero ofreció al presidente Miguel de la Madrid pagar la deuda externa que México tenía en ese entonces, estimada en 80 mil millones de dólares (1.6 billones de pesos actuales), a cambio de que lo dejaran ‘trabajar’ en el negocio de la droga sin conflictos.

“No, esos son inventos de la gente, eso salió de una plática que sostuve, ya estando detenido, con un agente del ministerio público, que me preguntaba por mis propiedades y yo por salir del paso le dije que tenía hasta para pagar la deuda externa (…)”, respondió Caro Quintero.

“Son puros cuentos de la gente que le gusta inventar cosas; y más cuando uno está aquí que no puede desmentir a nadie”, añadió.

La 'oficina’ de Caro Quintero

Durante su estancia en Puente Grande –describe Lemus- Caro Quintero se convirtió en uno de los presos ‘más queridos’, ya que, más allá de ganarse el respeto por ser quien es, "entre los internos se le quería por ser un preso nada conflictivo, una persona que se alejaba de los problemas y cada que podía evitaba que los demás tuvieran conflictos y trataba de ayudarles".

El capo vivía en la celda 150, a un lado de la del periodista, y tenía como compañero a Luis Armando Amezcua Contreras, mejor conocido como el 'Rey de las Anfetaminas'.

“Era de pocas palabras, cualquier diálogo que se le buscaba lo concluía en forma rápida, con frases concretas, bien explicadas, opiniones certeras y conceptos muy claros”, asegura Lemus en su libro.

Además, el escritor detalla que la prisión le formó el hábito del deporte a Caro Quintero, pues "corría sin descanso por más de una hora", pero lo que más le gustaba era sentarse en una banca a solas y, en diversas ocasiones, le hacía la invitación a alguien para acompañarlo en la 'oficina’.

En dicha ‘oficina’ mantuvo más de una conversación con el periodista mexicano, quien fue ‘afortunado', ya que el capo no acostumbraba a reunirse en grupo, era muy discreto al hablar y "ni una mala palabra se le salía de su boca".

"Jamás le escuché comentar temas de narcotráfico o delincuencia", cuenta Jesús Lemus sobre su convivencia con Caro Quintero en Puente Grande.