Caro Quintero, conocido como el 'Narco de Narcos', fue detenido el pasado viernes por elementos de la Secretaría de Marina, por lo que ahora muchos se preguntan si cesará o incrementará la ola de violencia causada por su conflicto con los 'Chapitos'.
Tras su detención, Caro Quintero actualmente se encuentra en el Centro Federal de Readaptación Social número 1 de Almoloya en espera de ser extraditado a Estados Unidos.
Esta es la segunda ocasión que Rafael Caro Quintero es capturado por las autoridades.
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La primera ocurrió en 1985, cuando fue arrestado en Costa Rica por el secuestro y asesinato del agente de la DEA, Enrique 'Kiki' Camarena. En aquella ocasión, el fundador del Cártel de Guadalajara pasó 28 años en la cárcel.
Durante este tiempo, el millonario negocio de drogas de Caro Quintero le fue 'arrebatado' por el ‘Chapo’ Guzmán, líder del Cártel de Sinaloa, acción que desataría una guerra interminable con 'futuras generaciones' del narco.
¿Por qué surgió el conflicto entre Caro Quitero y los 'Chapitos'?
En 2013, Caro Quintero salió de prisión, pues un tribunal ordenó su liberación al considerar que "no debió ser enjuiciado en el fuero federal por el asesinato del agente de la DEA".
Aunque en una entrevista con la periodista Anabel Hernández, Caro Quintero aseguró que ya no se dedicaba al narcotráfico, lo primero que hizo tras quedar en libertad fue tratar de recuperar el territorio que le había sido 'robado' por el ‘Chapo’ Guzmán.
Sin embargo, la disputa ya no fue directamente con el líder del Cártel de Sinaloa (quien también fue arrestado y extraditado a Estados Unidos), sino con los hijos de Joaquín Guzmán Loera conocidos como los 'Chapitos'.
Con el ‘Chapo’ en prisión, Caro Quintero dio el primer ataque, en La Tuna, en Sinaloa. Un grupo armado atacó la vivienda de la madre del capo y así inició la guerra entre ambos.
Tiempo desués, Caro Quintero formó el Cártel de Caborca, con el cual comenzó una disputa con los 'Chapitos' en los estados de Sonora, Sinaloa y Baja California, territorios que los hijos de Joaquín Guzmán Loera parece no piensan ceder.