Tras el anuncio de una suspensión provisional a las obras del tramo 5 sur del Tren Maya, los manifestantes y ambientalistas que se oponen a la ejecución irregular del proyecto adelantaron que no se quedarán sólo en instancias nacionales.
"Paralelamente estamos con otras acciones legales a nivel internacional. A nivel nacional estamos tratando de agotar todas las instancias, que si no nos responden, estaríamos llegando a la Corte Interamericana (de los Derechos Humanos). Esto estamos trabajando paralelamente con organizaciones locales, abogados nacionales de derecho ambiental y derecho internacional", dijo Gemma Santana, directora de Voto por el Clima y vocera de la campaña Sélvame del Tren.
En entrevista con Grupo Fórmula, explicó que las obras del Tren Maya atentan contra el derecho a un medio ambiente sano, razón por la cual se concedió la suspensión provisional dada a conocer el pasado lunes, sino también porque se está poniendo en riesgo la segunda selva de mayor tamaño en América Latina.
"Nos da además un 25 por ciento del oxígeno que respiramos", acotó. Resaltó también que este viernes realizarán movilizaciones en diversos puntos del país para protestar en contra de la obra.
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En ese sentido, reiteró que la oposición que muestran a la construcción del Tren Maya no es contra el proyecto en sí, sino contra su realización con carencias en términos legales y el incumplimiento de la ley.
"Si se presentan los estudios y se abren mesas de diálogo y se hacen las consultas conforme a la ley, y nos muestran el proyecto ejecutivo, y cumple con todo lo establecido, inclusive considerado por ONU Hábitat, no veo cuál podría ser el problema. Lo que estamos pidiendo es el cumplimiento de la legalidad y que se entreguen los estudios para ver si es factible o no. Desgraciadamente los estudios van a reflejar que no es factible, hay una cantidad inmensa de cenotes y subterráneas", advirtió.
Por ejemplo, recordó que el proyecto entero carece de proyecto ejecutivo y Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) en cuatro de los siete tramos; mientras que los primeros tres cuentan con una MIA regional pero que no contempla el impacto en las cinco entidades por donde pasará sino sólo las correspondientes a esa fase. En tanto que al tramo 4 presentó la MIA una vez que ya se habían iniciado las obras.
"No cumplen con los pasos de fauna, la legalidad del proyecto bajo la justificación del decreto de los megaproyectos, un decreto anticonstitucional. los proyectos biológicos y las consultas locales a mano alzada, No se tiene esa información y debería ser pública", lamentó.
Resaltan riesgos al medio ambiente por el Tren Maya
En una carta difundida este martes, más de 300 académicos, investigadores, activistas y organizaciones de la sociedad civil reclamaron al presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que el proyecto atenta no sólo contra el medio ambiente de la zona, de por sí afectado por las actividades turísticas y habitacionales en la zona.
"Este territorio, habitado por el pueblo maya desde tiempos ancestrales, ha generado modos de vida, costumbres, visiones del mundo y modos de producción y de subsistencia comunitarios, que respetan las condiciones ecológicas y aprovechan los potenciales de sus territorios; éstos no coinciden con los ideales de progreso, rentabilidad y urbanización que impulsa el proyecto Tren Maya", señala el documento.
Aunado a ello, se prevé que en el corto plazo, los cenotes y ríos subterráneos, donde se estima esté una de las mayores reservas de agua de México, se contaminen de forma irremediable por la infiltración de agua de lluvia que arrastre partículas del suelo derivadas de la obra y el desplante de árboles por la construcción del Tren Maya.
"En el momento en que empiece a llover, como todo el tramo está llena de hoyos, donde ya deforestados se alcanzan a ver los ríos y cenotes, cuando empiece a llover, esta agua no se va a poder filtrar y esto se va a ir directo con la tierra y todo lo que implica a contaminar los ríos y los cenotes. De ahí dependen los ciudadanos y el turismo", advirtió Santana.
No obstante, a pesar de la suspensión provisional otorgada esta semana, de la falta de estudios ambientales y de los eventuales daños que puede causar el proyecto en la zona norte de Quintana Roo, las obras del Tren Maya continuaron este martes, según reportaron activistas.