Este lunes 28 de marzo el Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI) dio a conocer su tercer informe de avances sobre las investigaciones que realizan en torno al caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa ocurrida en septiembre de 2014.
Durante el evento, llevado a cabo en la Secretaría de Gobernación (Segob), el grupo de expertos nombrados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), presentó los avances que ha logrado en las indagatorias en torno a este caso desde que retomó sus actividades en 2020.
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Como parte de su informe, el GIEI presentó un video inédito sobre acciones de marinos en el basurero de Cocula, además de denunció la simulación y falsificación de información por parte de autoridades.
Estos son los puntos más relevantes del tercer informe del GIEI sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
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GIEI revelan video inédito de marinos en basurero de Cocula
El Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes dio a conocer un video inédito, supuestamente grabado por un dron de la Secretaría de Marina (Semar), con el que se comprueba que al menos una docena de personas, presumiblemente marinos, arribaron al basurero de Cocula horas antes del entonces procurador Jesús Murillo Karam.
De acuerdo con el informe del organismo, no existe registro alguno, información o documentos que den fe o justifiquen la presencia de las fuerzas armadas en dicho lugar.
La grabación incluye una recreación en 3D de la escena del basurero de Cocula, sitio donde presuntamente habrían sido asesinados y calcinados los 43 normalistas de Ayotzinapa, así como imágenes captadas por un dron supuestamente operado por la Semar y que captó a presuntos marinos en el que fue señalado como el lugar de los hechos.
Este video muestra a presuntos elementos de la Marina manipulando tres bultos blancos que transportaban en dos camionetas, cuyo contenido no se pudo comprobar, y que desaparecieron luego de que iniciaron una hoguera en el mismo sitio en el que testigos aseguraron que los normalistas habían sido calcinados.
Durante las más de dos horas que dura la grabación se puede observar a al menos 12 presuntos elementos de la Marina deambulando por la zona, lo que provocó que la escena quedara seriamente contaminada, entorpeciendo las investigaciones de los peritos.
El GIEI detalló que tuvo acceso a estos videos que muestran actividades realizadas por marinos en el basurero de Cocula el 27 de octubre de 2014, así como a otros documentos confidenciales de la Marina calificados como “secretos”, el pasado 12 de noviembre de 2021.
Otra de las situaciones que fueron cuestionadas por las y los expertos fue el hecho de que el despliegue del dron que captó dichas imágenes sólo pudo ser ordenado por un alto mando, como el secretario de Marina o el propio presidente de la República, en aquel entonces Enrique Peña Nieto.
Normalistas fueron infiltrados por el Ejército
Otro de los hallazgos que destacó el GIEI fue el hecho de que la noche en que ocurrieron los hechos de Iguala, en los que desaparecieron los 43 normalistas, el Ejército mexicano tenía activos dos operativos de seguimiento a los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos.
Claudia Paz, exfiscal de Guatemala e integrante del grupo de expertos, recalcó que este hecho confirma que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tuvo conocimiento en tiempo real de la desaparición de los normalistas.
“Para nosotros fue un hallazgo muy importante, es que hubo dos operaciones de inteligencia, de seguimiento, que estaban en funcionamiento los días 26 y 27 de septiembre de 2014; un seguimiento que vamos a llamar ‘histórico’, casi contrainsurgente (…) Hay una orden expresa por parte de autoridades militares de dar seguimiento a los movimientos de los estudiantes dos días antes del 26 de septiembre”, recalcó.
Agregó que como parte de estas investigaciones se descubrió que incluso el movimiento de los normalistas había sido infiltrado por al menos un elemento del Ejército mexicano.
“Las autoridades en aquel momento contaban con información prácticamente minuto a minuto de lo que estaba ocurriendo, porque manejaban el C4 y también, esto es muy importante y es de los hallazgos que hemos tenido, porque los mismos estudiantes que iban en los autobuses estaban infiltrados, había agentes de inteligencia, lo que llaman en los documentos militares ‘fachada de estudiante’, que se encontraban en los autobuses y que seguramente estaban informando”, explicó.
En su informe, el GIEI detalló que la Comandancia de la 35 Zona Miliar ordenó a todos los batallones del estado de Guerrero que dieran seguimiento a las actividades de los estudiantes de la normal rural del Ayotzinapa.
GIEI denuncia simulaciones e información falsa
El Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes también alertó que existen múltiples simulaciones e información falsa que proporcionaron las dependencias acerca del caso Ayotzinapa.
Ángela Buitrago, abogada colombiana que integra el GIEI, recalcó que si bien las autoridades han respondido a las solicitudes de información, en la mayoría de las ocasiones los datos proporcionados eran falsos o no corresponden con los hechos reales.
“Hay una simulación en las respuestas a las solicitudes de información. Es importante ver algo fundamental; se responde, sí, al principio se responde, pero hemos encontrado que las respuestas no corresponden con la realidad”, aseveró.
Recalcó que distintas instituciones proporcionaron información falsa e incluso negaron hechos ocurridos durante los primeros años de la investigación por el caso Ayotzinapa, mismas que quedaron evidenciadas luego de que el grupo de expertos retomara sus laboren en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador .
“Varias instituciones suministran información contraria a la verdad; desde ese punto de vista diríamos que durante de los primeros 5 años inclusive negaron actividades que descubrimos a partir del 2020 y 2021”, acusó.
Buitrago señaló que algunas de las irregularidades que detectaron son:
- Construcción de versiones con simulaciones de llamadas, determinadas como anónimas, que no existieron.
- Constancias de llamadas ficticias creadas por funcionarios de la Procuraduría General de la República que se prestaron para la simulación.
- Simulaciones en las fechas de captura de los detenidos, en los lugares de su detención, en la forma en la que fueron remitidos y puestas a disposición falsas.
- Las tarjetas informativas de la policía municipal, estatal y federal, fueron falsas.
- Bitácoras que fueron alteradas en todo su contenido.
- Se cambió el número de las patrullas que intervinieron en los hechos.
- Se destruyó evidencia, como el video del Palacio de Justicia.
- Actas de diligencia de la PGR que son falsas, hecho por el que se inició la judicialización de los ministerios públicos que firmaron las actas.
La abogada colombiana recalcó que incluso el acta que reporta el hallazgo de los presuntos restos de los normalistas en el Río San Juan es salsa, pues “ni la Ministerio Público que firma ahí estuvo en el Río San Juan, ni presenció hechos que llevaron indiscutiblemente a judicializaciones”.
Autoridades sabían sobre Guerreros Unidos
Las y los expertos del GIEI recalcaron que las autoridades admitieron que cuándo se dio la desaparición de los estudiantes sí tenían conocimiento acerca de las operaciones de producción y trasiego de drogas operado por Guerreros Unidos en el estado de Guerrero.
En su informe, el GIEI recalcó que el gobierno contaba con información acerca de la producción de amapola, la producción de heroína y el tráfico de drogas mediante autobuses de pasajeros.
“Esto es muy importante porque siempre se nos negó esta información, es que todas las autoridades que estaban trabajando en el centro de coordinación Guerrero Seguro, federales, estatales, civiles y militares, contaban con información muy pormenorizada de las actividades de trasiego, siembra y cultivo de amapola, fabricación de heroína y trasiego en autobuses”, destacó Claudia Paz.
Recomendaciones del GIEI
Al final de su tercer informe sobre el caso Ayotzinapa, el GIEI emitió una serie de recomendaciones orientadas a garantizar que exista justicia en este caso, entre las que destacan:
- Desclasificar y garantizar el acceso a la información completa sobre transcripciones de intercepciones de comunicación.
- Insistir en la búsqueda y entrega de material original, como mensajes de texto, conversaciones o cualquier otra, relacionados a este caso.
- Utilizar criterios que permitan imputar responsabilidades a las cadenas de mando o atribución de responsabilidad similar.
- Revisar el concepto de asociación criminal para imputar a todos los integrantes de la organización las conductas planeadas y las eventualmente dolosas representadas.
- Utilizar análisis y mapeo geográfico de los delitos, consolidando la información para así evitar la pérdida de información que permita la elaboración de hipótesis sobre este caso.
- Guardar y evitar la destrucción de todos los documentos de todas las instituciones públicas y privadas.
- Definir la utilización de delitos como desaparición forzada y muertes ilegítimas o ejecuciones extrajudiciales en el caso Ayotzinapa.
- La judicialización de todos los responsables de los delitos de tortura, obstrucción, simulación o pérdida de información.
Este es el primer informe sobre el caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa que el GIEI presenta durante el gobierno encabezado por el presidente AMLO.