El aborto en Hidalgo y Veracruz se despenalizó en junio y julio de 2021, respectivamente. A poco más de un año de la aprobación de las reformas al Código Penal y a la Ley de Salud de cada entidad, las mujeres y personas gestantes de ambos estados continúan enfrentando diversas barreras y obstáculos para acceder a la interrupción legal del embarazo (ILE) de forma segura y gratuita.
En el caso de Hidalgo, el Congreso estatal aprobó una reforma que modificó el Código Penal y la Ley de Salud para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas.
En la entidad se han realizado 541 interrupciones legales del embarazo en hospitales de la entidad entre julio de 2021, cuando se publicó el decreto con el que se despenalizó el aborto en el Periódico Oficial, y hasta junio pasado, de acuerdo con información obtenida vía transparencia.
La mayoría de los procedimientos, 240, se realizaron con mifepristona y misoprostol combinados; 222 con misoprostol, 78 con aspiración manual endouterina (AMEU) y de 1 procedimiento no se tiene información.
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La interrupción con medicamentos y la AMEU están reconocidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por su efectividad y seguridad. Ambos procesos son ambulatorios, es decir, que no requieren hospitalización y no son de riesgo.
Aunque Hidalgo no cuenta con clínicas en las que sea posible realizar el procedimiento de forma ambulatoria. Por lo que quienes interrumpen su embarazo con AMEU tienen que permanecer 24 horas en observación por protocolo médico en las instituciones de salud en las que realicen la intervención, asegura Daniela Téllez, integrante de la colectiva de acompañantes DiRAMONA.
Datos de DiRAMONA señalan la Secretaría de Salud de Hidalgo realizó 720 interrupciones legales del embarazo entre julio del año pasado y agosto de 2022. Mientras que en el mismo periodo de tiempo, la colectiva acompañó 1 mil 198 procedimientos de mujeres del estado y de otras partes de la República Mexicana, así como de América Latina.
¿Cuáles son los obstáculos para practicarse un aborto en Hidalgo?
Entre ellos se encuentra la falta de acceso a las instituciones de salud, ya que sólo 16 unidades de atención médica brindan el servicio de interrupción legal del embarazo (ILE), de las cuales 3 están en Pachuca y las otras 13 se distribuyen en los 83 municipios restantes, de acuerdo con Téllez.
“Ni siquiera estamos hablando de la mitad de municipios cubiertos donde se esté brindando el acceso. Eso de por sí es una llamada de atención muy importante porque significa que hay muchísimas mujeres que tienen que atravesar grandes distancias para poder acercarse a un servicio y eso ya es preocupante”, comenta.
Las unidades de salud en las que las mujeres y personas gestantes pueden acceder al servicio de aborto son:
- Hospital General de Pachuca, Hospital Obstétrico de la Mujer y la Clínica de Salud Sexual y Reproductiva, los tres en el municipio de Pachuca.
- Hospital Regional del Valle del Mezquital, ubicado en el municipio de Ixmiquilpan.
- Hospital General de Actopan, en el municipio de Actopan.
- Hospital General del Altiplano, en el municipio de Apan.
- Hospital Integral Atlapexco, en el municipio de Atlapexco.
- Hospital Básico Comunitario de Huehuetla, en el municipio de Huehuetla.
- Hospital Regional de la Huasteca, en el municipio de Huejutla.
- Hospital General de Huichapan, en el municipio de Huichapan.
- Hospital Integral de Jacala, en el municipio de Jacala.
- Hospital Integral de Cinta Larga, en el municipio de Mixquiahuala.
- Hospital Regional Otomí Tepehua, en el municipio de San Bartolo Tutotepec.
- Hospital Integral de Tlanchinol, en el municipio de Tlanchinol.
- Hospital General de Tula, en el municipio de Tula.
- Hospital General de Tulancingo, en el municipio de Santiago Tulantepec.
La acompañante de aborto señala que el servicio de interrupción legal del embarazo debería brindarse en cualquier centro de salud; pues la mayoría de los procedimientos se realizan con medicamentos, por lo que no se requiere hospitalización, ni un “sistema ultratecnológico”, ya que es como recetar cualquier medicamento.
La falta de una unidad médica que proporcione el servicio de ILE por municipio provoca que en ocasiones se saturen las 16 instituciones de salud en las que sí se garantiza este derecho.
Desabasto de misoprostol y mifepristona, una barrera para acceder al aborto
La integrante de DiRAMONA detalla que entre mayo y junio hubo desabasto de medicamentos para abortar en Hidalgo, ese es otro problema. Al respecto, añadió que, a pesar de que el desabasto de fármacos es generalizado a nivel nacional no debería de suceder con los medicamentos que se usan para abortar porque las mujeres y personas gestantes sólo pueden interrumpir sus embarazos hasta las 12 semanas de gestación.
“Aunque sabemos que en la práctica no debiera ser así porque un aborto es seguro, independientemente de las semanas de gestación que se tengan siempre y cuando haya personal capacitado para brindar la atención necesaria”, afirma.
IMSS e ISSSTE no garantizan acceso al aborto
Otro obstáculo que enfrentan las mujeres y personas gestantes es que cuando son derechohabientes del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) no les proporcionan el servicio de ILE. Por lo que todo recae en la Secretaría de Salud de la entidad.
“Si bien sabemos que por ley se rigen bajo reglamentos federales, hay que entender que las realidades de los estados son diversas y que además ya hay sentencias de la [Suprema] Corte desde 2021 que nos indican que ninguna persona puede ser criminalizada por abortar y que, por lo tanto, esto ya tendría que estarles dando carta abierta a los sistemas IMSS e ISSSTE para brindar servicios de interrupción legal del embarazo en aquellas [entidades] donde ya se despenalizó”, asegura.
La acompañante de aborto de DiRAMONA considera que el acceso a la ILE se debería de garantizar en centros de salud y clínicas del IMSS e ISSSTE para que todas las mujeres y personas gestantes de la entidad puedan ejercer su derecho en caso de necesitarlo. Incluso aquellas que viven en áreas rurales que se encuentran lejos de las urbes.
No todo el personal de salud está capacitado para garantizar el acceso al aborto
Por otra parte, se encuentran las barreras sociales que enfrentan las mujeres y personas gestantes para acceder al aborto. Aún hay personal médico en la entidad que no se ha capacitado para brindar este servicio. Lo que está directamente relacionado con el estigma que aún existe sobre el tema, a pesar de que es un procedimiento médico normal, cotidiano, sencillo y esencial dentro de los sistemas de salud, apuntó la acompañante.
El estigma social continúa provocando que las mujeres y personas gestantes que deciden abortar prefieran hacerlo en sus casas y algunas prefieren trasladarse a la Ciudad de México para realizarse el procedimiento.
Las acompañantes de aborto esperan que el cambio de gobernador, de Omar Gali Fayad a Julio Menchaca, y de partido político del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a Morena, no signifique un retroceso en el acceso a derechos sexuales y reproductivos de las mujeres y personas gestantes.
Ello debido a que Hidalgo es uno de los estados que mejor implementó la despenalización del aborto tras su aprobación en el Congreso del estado.
Falta información sobre la ILE
La Secretaría de Salud y el gobierno de Hidalgo no han realizado campañas informativas para que todas las mujeres y personas gestantes del estado sepan cuáles son los hospitales públicos que se ubican en su territorio en los que pueden abortar sin trasladarse a otras entidades. Lo que provoca que haya quien continúe sin saber que es su derecho.
Las campañas de información las ha realizado la sociedad civil, colectivas y organizaciones y en conjunto han recopilado información sobre los lugares a los que pueden acudir, horarios, papeles que tienen que presentar y el departamento al que se tienen que dirigir.
Incluso colocaron las direcciones en Google Maps para que las mujeres y personas gestantes de Hidalgo puedan encontrar las instituciones de salud de forma más fácil.
DiRAMONA realizó una campaña a la que nombró "ILE Hidalgo" y activó una línea telefónica que continúa abierta de lunes a viernes de 9:00 a 14:00 horas. El objetivo es brindar información sobre los pasos que tienen que seguir si quieren abortar, les proporcionan números y direcciones de la Clínica de Salud Reproductiva y, en caso de que no quieran acudir a un hospital o clínica pública, las canalizan con acompañantes para que puedan realizar el procedimiento de forma segura desde su casa o en la Ciudad de México.
Aún es necesario que se cree un programa destinado al aborto o interrupción legal del embarazo en Hidalgo para que le asignen recursos, ya que no existe. La Secretaría de Salud estatal reconoció que no existe vía transparencia.
“Con base en la Estructura Programática que los Servicios de Salud de Hidalgo ha utilizado durante el periodo comprendido entre el ejercicio fiscal 2018 al 2022, informo a usted que no se cuenta con un proyecto destinado específicamente para la práctica de abortos en hospitales públicos”, respondió la dependencia.
Veracruz enfrenta problemas de desinformación entorno al aborto
Desde julio de 2021 es legal abortar hasta las 12 semanas de gestación en Veracruz, gracias a una reforma al Código Penal que aprobó el Congreso de la entidad. No obstante, la iniciativa no incluía cambios a la Ley de Salud estatal.
Por lo que el gobierno de la entidad publicó diversos protocolos en noviembre del mismo año para que las mujeres y personas gestantes pudieran ejercer su derecho y así subsanar la falta de una iniciativa que modificara la Ley de Salud.
El Directorio de Servicios de Aborto Seguro (SAS) indica que en la entidad hay 6 instituciones de salud que cuentan con el servicio para atender 212 municipios; cuando, por lo menos, debería haber una clínica u hospital por cada una de las 11 jurisdicciones sanitarias, subrayó Luz María Reyes, integrante de Marea Verde Altas Montañas, colectiva del municipio de Orizaba.
La Secretaría de Salud de Veracruz registró que alrededor de 196 personas ejercieron su derecho al aborto en la entidad desde que se despenalizó y hasta agosto de este año, de acuerdo con datos obtenidos vía transparencia.
Aunque este año fue el aniversario de la aprobación de la interrupción legal del embarazo en la entidad, las mujeres y personas gestantes veracruzanas continúan enfrentando varios obstáculos para acceder a esta.
La desinformación es uno de ellos y fue una constante durante los primeros meses posteriores a la despenalización, advirtió Luz María Reyes.
“Nos empezaron a llegar muchas solicitantes que acudían a los centros de atención del sector salud y pues les negaban el servicio o eran revictimizadas”, detalló en entrevista con Grupo Fórmula.
Las mujeres y personas gestantes se enteraron que podían acceder a la ILE en Veracruz porque fue una noticia importante, pero el sector salud no contaba con la información suficiente y los elementos necesarios para garantizar el servicio.
Así que el trabajo de organizaciones, colectivas y acompañantes autónomas se volvió fundamental, como en todos los estados. Un ejemplo es que Marea Verde-Altas Montañas elaboró una “ruta crítica” para canalizar de forma adecuada a quienes les piden asesoría y ayuda para abortar.
También hubo desabasto de misoprostol
El personal de salud empezó a compartir más información con la emisión del protocolo de la Secretaría de Salud para garantizar el acceso al aborto. Sin embargo, surgió otro problema: el desabasto de misoprostol.
Este es un obstáculo generalizado en la mayoría de las entidades en las que la interrupción del embarazo es legal según la investigación que realizó este medio de comunicación.
En Veracruz también sigue presente la revictimización hacia quienes deciden interrumpir sus embarazos. Luz María Reyes sostuvo que esto suele ocurrir con el personal de salud con el que las mujeres tienen el primer acercamiento para pedir información y se deriva del desconocimiento, las malas prácticas, y de que colocan sus costumbres antes que la ley.
Los obstáculos provocan que las usuarias del servicio de aborto desconfíen y se resistan a acudir a las instituciones de salud pública para interrumpir sus embarazos. Muchas de ellas prefieren abortar con la asesoría de acompañantes porque les tienen más confianza y el trato que les dan es empático.
Esta información forma parte de la investigación especial Sobrevivir juntas a la violencia contra las mujeres realizado en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres (#25N).