El Informe de la Presidencia de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (Covaj), encabezada por Alejandro Encinas, no es una nueva ‘verdad histórica’ creada para explicar el paradero de los 43 normalistas desaparecidos, pero sí es una ‘torpeza’ de la llamada cuarta transformación (4T), advirtió el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).
Este lunes 31 de octubre el grupo de expertos presentó el resultado del peritaje realizado a las capturas de WhatsApp incluidas en dicho informe y en las que supuestamente se revela el paradero de los estudiantes, mismas de las que –advirtió- no se puede comprobar su autenticidad, por lo que no deben considerarse como pruebas.
Dicho análisis reveló que existen elementos que no permiten constatar la autenticidad de las capturas de conversaciones en las que se daba cuenta del paradero de los 43 normalistas, quienes supuestamente habían sido separados, asesinados y sus restos abandonados en distintos puntos.
Informe de Encinas no es nueva 'verdad histórica': GIEI
Ante la posibilidad de que dichas capturas se traten de pruebas ‘creadas’ como parte de una nueva ‘verdad histórica’ orquestada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para cerrar el caso Ayotzinapa, tal como ocurrió en el gobierno de Enrique Peña Nieto, el grupo de expertos recalcó que se trata de situaciones distintas.
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“Como GIEI consideramos que no estamos ante la construcción de una nueva verdad histórica, hay elementos que son sustantivamente diferentes de lo que ocurrió a finales del 2014”, destacó Claudia Paz y Paz.
La experta detalló que las principales diferencias entre las investigaciones hechas en el gobierno anterior y el actual es que en esta ocasión sí tuvieron acceso a todos los chats presentados en el informe de la Covaj, lo que les permitió realizar los peritajes que revelaron inconsistencias.
Agregó que las conclusiones de dicho peritaje fueron aceptadas por las autoridades y no fueron rebatidas, lo que ayudó a evitar que se diera una “guerra de peritajes” que podrían afectar a los familiares de los normalistas desaparecidos.
Otro de los puntos que destacó es que no ha habido evidencia de que las supuestas pruebas presentadas en el informe de la Covaj fueron obtenidas bajo tortura, algo que sí ocurrió con la ‘verdad histórica’ del gobierno de Peña Nieto.
“En este momento nosotros no tenemos ninguna evidencia de que se haya torturado a nadie para convalidar la fabricación por parte de la Fiscalía General de la República (FGR)”, recalcó Claudia Paz y Paz.
Por otra parte, Francisco Cox insistió en que no es posible confirmar la autenticidad de las capturas de WhatsApp presentadas como prueba del paradero de los 43 normalistas incluidas en el informe de la Covaj, mismo que calificó como una ‘torpeza’.
“Esto no es una nueva ‘verdad histórica’ en términos de que no se ha torturado para que se diga eso, pero es una torpeza, es una precipitación”, aseveró Francisco Cox.
Los expertos del GIEI insistieron en que el informe de la Covaj –encabezada por Alejandro Encinas- no se trata de una nueva ‘verdad histórica’ creada por la 4T para explicar el paradero de los 43 normalistas de Ayotzinapa, pero sí hicieron un llamado para que se investigue cómo se obtuvieron las capturas de WhatsApp que presentaron como prueba.