Uno de cada tres mexicanos tuvieron un alza de peso en un rango entre 8 y 10 kilos, de acuerdo con un reporte de Laura Cardoso para el espacio de Joaquín López-Dóriga en Grupo Fórmula. Ello se sumó a que, de acuerdo con Daniela Thomas, especialista en nutrición, antes del confinamiento, el 74 por ciento de la población adulta ya tenía obesidad y de los niños ya enfrentaban esta condición.
"El confinamiento dejó en la población mexicana un aumento promedio entre ocho y diez kilogramos extra o excedente del peso que ya teníamos", sostuvo.
Esto porque el encierro por la pandemia de COVID-19 y el trabajo en casa significaron un cambio de hábitos, con repercusiones físicas, sino que también afectaron la salud mental con padecimientos como ansiedad y depresión.
Además, explicó que con la recuperación de la vida cotidiana también vino una búsqueda de dietas y productos milagro, que no sólo no ayudan, sino que pueden perjudicar la salud, ya que no todos los organismos son iguales.
Te podría interesar
"Se consideran productos milagro, porque son carentes de información científica, y si nosotros los tomamos o los consumimos, nuestra salud puede comprometerse", explicó Daniela Thomas.
Asimismo, la experta señaló que la respuesta al sobrepeso no se encuentra en internet. Y dijo que además de una buena dieta se tiene que procurar ejercitarse.
Las enfermedades cardiovasculares son el padecimiento número como causa de muerte a nivel internacional, según información de Laura Cardoso, reportera de Grupo Fórmula.
La Organización Mundial de la salud (OMS) define la obesidad como una acumulación anormal o excesiva de grasa corporal que implica riesgos para la salud y que ha alcanzado proporciones epidémicas.
Los datos epidemiológicos sugieren que tanto la incidencia como la prevalencia de sobrepeso y obesidad siguen una tendencia creciente. De hecho, para el 2030 se prevé que una de cada cinco mujeres y uno de cada siete hombres presentarán obesidad, en todo el mundo.