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DERECHOS HUMANOS

Ni vacunas ni escuelas: Niñez y adolescencia perdió derechos con el COVID-19

La falta de acceso a vacunas, el desabasto de medicamentos y el tardío regreso clases fueron algunos de los problemas que vulneraron los derechos de niñas, niños y adolescentes.

Créditos: Foto: Mario Jasso /Cuartoscuro.
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En 2021, los principales problemas que vulneraron el derecho a la salud de niñas, niños y adolescentes mexicanos fueron: la falta de cobertura en vacunación; el desabasto de medicamentos para enfermedades graves, principalmente para atender el cáncer.

Así como rezagos en la alimentación saludable, ante el regreso presencial a las escuelas, de acuerdo con el Balance Anual Discriminación y violencia contra la niñez durante la sindemia 2021 de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).

El gobierno federal excluyó a niños, niñas y adolescentes de la política de vacunación contra COVID-19. Asimismo, hubo una caída en la inmunización contra enfermedades del esquema básico.

Por ello, la organización exhortó, en varias ocasiones, al gobierno federal a actuar ante la falta de cobertura de vacunación. En total, 82 mil 234 infantes y adolescentes se infectaron de SARS-CoV-2 durante 2021.

Además, hubo desabasto de medicamentos para atender los padecimientos de los menores, principalmente en aquellos que se requieren para tratar el cáncer.

Alrededor de 2 mil 77 niños, niñas y adolescentes (897 mujeres y 1 mil 180 hombres) perdieron la vida a consecuencia de tumores (neoplasias), de acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística. Lo que se tradujo en 5.7 defunciones de personas de este grupo de edad por día en el país.

En este sentido, la directora ejecutiva de Redim, Tania Ruiz Hernández, dijo que el llamado de padres y madres, de niños, niñas y adolescentes que padecen cáncer, tiene que ser escuchado.

Necesario cambiar ambientes alimenticios de escuelas

La activista aseguró que el retorno a clases presenciales provocó que voltearan a ver un tema pendiente que existía desde antes de que llegara la pandemia: transformar los ambientes obesogénicos de las escuelas en ambientes saludables.

“Es lamentable ver que la obesidad o hipertensión forman parte de las comorbilidades de COVID-19 y ver que niñas y niños afectados por este virus tenían sobrepeso”, comentó.

Para lograrlo, la organización indicó que se debe formalizar el Acuerdo por el que se hace oficial la materia de “Vida Saludable” en los planes de estudio de educación básica; acción con la que estuvo de acuerdo el presidente Andrés Manuel López Obrador.

1.5 millones de niños, niñas y adolescentes no regresó a clases por COVID-19

El Balance también señala que el retorno de los niñas, niños y adolescentes se dio en un contexto de riesgos y limitantes en el derecho a la educación.

Esto se debe a que el impacto de tantos meses sin haber estado en las escuelas se hizo evidente; pues 1.5 millones de personas entre los 3 y 18 años ya no se inscribieron por motivos asociados a COVID-19; 529 mil por falta de dinero o recursos y 310 mil, de entre los 13 y 18 años, porque tenían que trabajar.

El último censo que se realizó en 2020 encontró que 16.4 por ciento de las personas de 3 a 17 años no asistían a la escuela en México (5.3 millones). El porcentaje era menor entre las mujeres y mayor en los hombres, con 15.7 por ciento y 17 por ciento respectivamente.

Mientras que una tercera parte de la población de entre 3 y 4 años (el 36.5 por ciento) no asistía a la escuela y una cuarta parte de las y los adolescentes de 15 a 17 años (el 27 por ciento) no estudiaban.

Adultocentrismo marcó el regreso a clases

Redim concluyó que el regreso a clases presenciales estuvo marcado por el adultocentrismo. Las encuestas identificaron que 6 de cada 7 padres y madres no querían que los menores regresaran a clases presenciales.

Mientras que la consulta que realizó la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México reveló que 7 de cada 10 niñas, niños y adolescentes sí querían regresar a las aulas; 2 de cada 10 quería continuar con sus estudios en casa y 1 de cada 10 no sabía si quería volver o no.

Dicha consulta fue de los únicos ejercicios de participación que tomó en cuenta la opinión de los menores de edad. A pesar de eso, México abrió primero los centros comerciales, los bares, cines, casinos y fue de los últimos países en reabrir los centros educativos.

La organización destacó que la niñez y adolescencia ha dado una lección que calificó de “de altura, comprensión y responsabilidad” porque después del retorno a las escuelas no hemos tenido repuntes.

“Hoy por hoy el deber del Estado es garantizar el derecho de educación y a la atención de servicios médicos y medicamentos”, enfatizó Tania Ruiz.