Este jueves se llevará a cabo el Simulacro Nacional 2024, lo que ha reavivado el temor por la posibilidad de un sismo en el país. Ante este escenario, una de las creencias populares más comunes es que comer un bolillo ayuda a calmar el susto. Sin embargo, para las personas que viven con diabetes, surge la duda de si esta práctica es recomendada.
Pero ojo: los sismos no son los únicos detonantes de estrés que podemos enfrentar, por ello es importante saber qué sí y que no hacer durante un momento de preocupación o un susto.
¿Sí sirve el bolillo para el susto?
El bolillo sí es útil para los sustos, así lo explica Nayeli Xochiquetzal Ortiz Olvera, profesora de la Facultad de Medicina (FM) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Y es que enfrentarse a un estrés agudo provoca un aumento en la producción de ácido estomacal, lo que lleva a un dolor en el vientre comúnmente percibido como vacío. Dicha situación puede causar naúseas y otros malestares.
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"En tales casos, ingerir un pan reduce esa acidez tan molesta, como bien sabían nuestros antepasados”, explica la profesora de la UNAM.
La académica explica que por su cantidad de carbohidratos, este alimento inhibe la secreción de ácidos y nos ayuda a reponernos de un susto.
"Además, por ser masudo y tener la corteza dura, nos obliga a masticar, lo cual nos distrae y aminora nuestros miedos”, explica.
Además del bolillo, otros alimentos como frutas, fibra y lácteos también pueden ayudar a reducir la acidez gástrica, ya que cambian el pH del estómago.
¿Las personas con diabetes pueden comer bolillo?
Hay una serie de mitos sobre el consumo del bolillo, muchas personas aseguran que ingerirlo después de un susto puede provocar diabetes, pero esto es falso.
De acuerdo con la UNAM, incluso las personas diabéticas pueden consumir bolillos después de un sobresalto sin problema, "ya que ayuda a estabilizar el azúcar y evita mareos".
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