Para tener una alimentación saludable no sólo es necesario seguir el ‘plato del buen comer’, también es preciso lavar y desinfectar correctamente los ingredientes con los que prepararemos los guisos.
Es por eso que hoy te diremos cómo limpiar una cebolla, antes de que la utilices para diversos preparados como el mejor encurtido que proviene de una receta de chefs.
¿Cómo lavar y desinfectar la cebolla correctamente?
La cebolla es una planta herbácea que pertenece a la familia de las amarilidáceas. Como se cultiva en la tierra, al momento de que se saca queda con mucho polvo.
Por eso es importante que la aseemos antes de la ingesta, así se removerán efectivamente los restos de suciedad o fertilizantes que pudiera tener.
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Si vas a comer cebolla cruda lo mejor es que la sometas a un procedimiento de higiene cuando ya esté picada, justo antes de su consumo y con ayuda de agua fresca y fría:
- El primer paso es quitar dos capas de piel de la cebolla.
- Luego corta la cantidad de cebolla que usarás para cocinar.
- Emplea un recipiente hondo para colocarle agua y unas gotitas de desinfectante para frutas y verduras.
- Sumerge la cebolla y deja reposar por 3 minutos.
- Después retira el agua con un colador y vuelve a enjuagar para retirar los restos de producto químico, aunque asegúrate de que sea con agua potable (y que repose por dos minutos).
- Seca con ayuda de servitoallas y listo, ya puedes emplear la cebolla cruda para tus tacos, tu ceviche, tu aguachile o cualquier otra preparación.
¿Qué beneficios tiene la cebolla para el cuerpo humano?
De acuerdo con la Fundación Española de la Nutrición, las cebollas son fuente de vitamina C, potasio, proteínas, flavonoides y distintos compuestos azufrados.
La mejor forma de acceder a sus nutrientes es ingiriendo este alimento crudo y frío, pues es termosensible y disminuye sus propiedades cuando se cocina.
¿Por qué lloran los ojos con la cebolla?
La Fundación Española de la Nutrición explica que la cebolla tiene un sabor picante debido a su contenido de ‘esencias volátiles sulfurosas’.
“Uno de los componentes de estas esencias se disuelve con rapidez en agua y produce ácido sulfúrico; éste puede formarse en la película lacrimal que recubre el ojo, y por eso se llora al cortar cebolla”, refiere el portal del organismo.
Así que ya lo sabes: antes de consumir cebolla cruda, asegúrate de cortarla y desinfectarla correctamente para que no vayas a enfermarte del estómago.
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