Tener sardinas enlatas en tu despensa puede sacarte de un gran apuro, pero ¿qué pasa cuando comes sardinas enlatas todos los días? Esto dicen los expertos.
Las sardinas son un tipo de pescado que puedes encontrar enlatado en diversas presentaciones, desde bañado en salsa de tomate hasta conservado en aceites de oliva, soya y muchos más.
¿Qué pasa si comes sardinas todos los días?
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural comer sardinas tiene muchos beneficios a la salud, debido a que tiene altos niveles de proteínas y nutrientes que desarrollan y fortalecen el organismo humano.
Uno de los más importantes es que disminuye el colesterol, lo que contribuye a evitar enfermedades cardiovasculares como ataques al corazón y trombosis (coágulos de sangre en las venas), entre otras.
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También previene la anemia, ya que es rica en vitaminas A, B y D, así como en calcio, fosforo, potasio, zinc, yodo, hierro y magnesio. A la par combate problemas estomacales y reduce la depresión y el asma, debido a que contiene vitaminas B12 y B6.
Incluso comer sardinas puede disminuir el riesgo de padecer diabetes tipo 2, reveló un estudio del Hospital Clínic Barcelona que analizó el consumo de este pescado en personas mayores de 65 años diagnosticadas con prediabetes dos veces a la semana.
Como resultado del ejercicio, la institución descubrió que quienes incluía sardinas en su dieta experimentaron una mejoría notable, debido a que el omega 3 que contiene este tipo de pescado y otros nutrientes mejoran la respuesta a la insulina.
Sin embargo, debes saber que consumir sardina enlatada también puede tener afectaciones a la salud, debido a que se usa una cantidad elevada de sodio para conservarlas, lo que afecta la tensión arterial y puede provocar una mayor retención de líquidos y problemas cardiovasculares.
Además si se encuentra conservada con aceites, estos podrían aumentar el contenido de calorías, colesterol y grasa que pueden aportar y al estar enlatadas pueden contener residuos de bisfeno- A, un compuesto orgánico que se emplea en el recubrimiento plástico del interior de las latas, y el cual ha sido relacionado con afectaciones al cerebro y al sistema reproductivo, aunque los estudios no han sido concluyentes.
¿Qué meses son mejores para comer sardinas?
Aunque hay sardinas enlatadas todo el año, en México la temporada de pesca de esta especie comienza en mayo y termina hasta el mes de octubre.
Es por ello que en este periodo puedes encontrar sardinas frescas más grandes y de mejor calidad. Y es que en esta temporada las aguas superficiales son más cálidas, el plancton es más abundante y las sardinas se sobrealimentan, engordando y acumulando gran cantidad de grasa.