El calor no para y parece que continuará todavía durante unas semanas más. Sí, aunque ya sintamos que no podemos más con las altas temperaturas, el sol pegando fuerte y en general esa sensación termal que está alrededor, y aunque deseemos ir con un ventilador incluido a todos lados, no es posible.
Lo mejor es ver formas de enfrentarnos al calor, y el usar desodorante o antitranspirante es una de esas cosas que no pueden faltar si es que deseamos enfrentarnos a este clima y a los malos olores, pero, ¿cuál es mejor? Existen entre estas ciertas diferencias y al conocerlas mejor, podremos deducir cuál es el adecuado.
¿Por qué el desodorante y antitranspirante son distintos?
Se supone que ambos están hechos para combatir un enemigo en común: “el sudor”. Entonces, ¿por qué se llaman de distinta manera? Incluso uno podría pensar que es un simple sinónimo, pero la realidad es que sus propósitos pueden tener ciertas variaciones.
Pues bien, no es que sean cosas contrarias, pero sus maneras de actuar son donde difieren. Sus diferencias principales son:
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- Desodorante: su tarea es camuflar el mal olor de la transpiración, más no detenerlo, por lo que no evitará que sudemos, solo evita el mal olor.
- Antitranspirante: en el caso del antitranspirante busca evitar el sudor, además del mal olor, todo esto lo hace gracias a las sales de aluminio.
¿Qué es mejor desodorante o antitranspirante?
En cuanto a cuál es mejor para nosotros, dependerá de lo que se busque. Puede que seas de las personas que casi no suda, por lo que un desodorante podría ser la respuesta.
Y aunque en el pasado se asoció las sales de aluminio con problemas de la salud, la BBC reconocido canal de difusión británico, aclara que no hay evidencia concluyente.