Ya sea a la mantequilla, a la boloñesa o sólo con crema, el spaghetti es una de las pastas más famosas en nuestro país, pero ¿cuál es la sopa de spaghetti más saludable y barata que puedes comprar, según Profeco?
Debido a su popularidad, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) elaboró un análisis en el que examinó el contenido de proteína, carbohidratos, sodio, grasa (ácidos grasos saturados) y aporte calórico de 52 pastas para sopa, entre ellos, varias marcas de spaghetti.
Como parte del estudio, también se evaluó que cumplieran con el contenido de humedad y cenizas que establece la norma que tuviera el contenido neto que declaraban y su precio.
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¿Cuál es el spaghetti más saludable y barato puedo comprar?
Tras varias pruebas, la Profeco concluyó que el spaghetti más saludable y de menor precio fue el de la marca Aurrera que tuvo un costo promedio de 1.60 pesos por cada 100 gramos.
La pasta de sémola de trigo duro Spaghetti de la marca Aurrera indicó estar adicionada con hierro y ácido fólico, así como reconstituida con vitaminas B1, B2 y B3.
En cuanto a su contenido, presentó 75.5 por ciento de carbohidratos, 11.5 por ciento de proteína, 1 por ciento de grasa y 0.024 por ciento de sodio y 357 kilocalorías por cada 100 gramos de producto. Además, esta presentó la información completa al consumidor y cumplió con la veracidad de la información.
Aunque el estudio realizado por la Profeco data de 2017, actualmente puedes encontrar el spaghetti de la marca Aurrera en un precio promedio de 5.50 pesos en su presentación de 200 gramos.
¿Cómo elegir un buen spaghetti?
Para elegir una buena sopa de spaghetti, la Profeco recomienda revisar que el envase esté íntegro y no presente ninguna alteración; verificar si contiene gluten o huevo, por si alguna personas tiene alergias a estos ingredientes y guardarlos en recipientes cerrados, protegido de la humedad.
También sugirió seguir siempre las indicaciones del fabricante para su cocción y tener presente que los contenidos de grasa y sodio en la pasta son pequeños, pero pueden incrementarse al cocinarlos si se agrega más ingredientes en la elaboración de sopas.