Uno de los mayores retos del cuidado del hogar es mantener las paredes como nuevas, ya se libres de moho o humedad, además de libres de agujeros que dejan los clavos. No siempre se necesita resanar con yeso o cemento, sino que se puede hacer una mezcla con ingredientes que todos tenemos en caso; conoce en qué consiste este truco.
Es importante precisar que este truco sólo funciona para agujeros que dejan clavos de pocas pulgadas (por ejemplo de 3/4 ó 1); en el caso de los que son más gruesos o los tornillos, puede que este tip no sea lo mejor y, en ese caso, lo mejor será comprar material de construcción para regenerar dicho espacio.
¿Cuál es el truco para tapar que dejan los clavos en la pared?
Para este truco, las personas sólo necesitan de un par de ingredientes: pasta de dientes (de preferencia blanca) y una aspirina. El primer paso es moler la aspirina hasta que quede hecha polvo por completo.
El siguiente paso es mezclar el polvo de la aspirina con la pasta de dientes, hasta crear una pasta homogénea. Así de fácil se forma una masilla que se puede usar para tapar los agujeros dejados por los clavos en la pared y quedará sellado por completo, según El Español; las personas de procurar que la superficie quede lisa.
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Al final, las personas sólo tienen que aplicar un poco de pintura para disimular por completo el agujero. Otra mezcla que también se puede hacer es de bicarbonato de sodio y pegamento blanco; el procedimiento es el mismo: mezclar ambos ingredientes hasta crear una pasta homogénea y sellar las paredes.
¿Qué es mejor para resanar, yeso o cemento blanco?
Similar al caso anterior, el material a elegir dependerá del tamaño que haya dejado el clavo en la pared: el yeso es mejor para orificios que son pequeños, mientras que el cemento blanco es más conveniente cuando los agujeros resultan más grandes o profundos, de acuerdo con el blog Construye Mejor.
Ahora bien, el yeso es una opción más económica para resanar paredes en comparación con el cemento blanco, pero resulta menos resistente, ya que éste último material presenta una mejor duración ante el agua y la humedad. Asimismo, el yeso es de una aplicación más sencilla.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que el yeso, al secarse, tiene una textura más rugosa e irregular; mientras que el cemento blanco es más liso, lo que facilitará la aplicación de la pintura y que la pared quede como nueva.