Mantener el baño limpio siempre es una ardua labor, y más cuando se trata de los cabellos en la regadera. Sin embargo, hay dos partes del baño que rara vez tomamos en cuenta al momento del aseo: la regadera y el grifo.
Aunque no lo creas, la limpieza deficiente en estos no sólo puede afectar tu salud, sino que también hace que la presión con la que sale el agua disminuya. Y seamos sinceros, a nadie le gusta bañarse con un chorrito de agua.
Si notas que tu regadera o grifo ya no sacan tanta agua como antes, que sale con chorros gruesos o de plano ya no tiene la presión de antes, seguramente es por la acumulación de minerales que se encuentran en el agua local. Estos minerales forman el famoso sarro, el cual es un tapón duro y terroso que obstruye el flujo del agua.
¿Qué es bueno para quitar el sarro de la regadera?
Si tienes este problema, esto es lo que puedes hacer para recuperar la presión de tu regadera. Solo necesitas:
Te podría interesar
- Una taza de agua caliente
- Media taza de vinagre blanco
- Jugo de 3 limones grandes
- Cepillo
- Bolsa o recipiente de plástico lo suficientemente grande
Procedimiento:
- Si el cabezal de tu regadera se puede quitar, agrégalo al recipiente de plástico junto con todos los ingredientes. En caso contrario, agrega todos los ingredientes a la bolsa y amárralo al cabezal, de manera de que la mezcla cubra todos los orificios.
- Déjalo remojar de preferencia toda la noche, o por lo menos dos horas.
- Pasado este tiempo, talla con un cepillo muy bien el cabezal. De ser posible, vuelve a utilizar la mezcla caliente para que el resultado sea óptimo.
- Una vez limpio, vuelve a colocarlo y abre la regadera con la temperatura más caliente que se pueda (recuerda no desperdiciar agua y recoléctala en alguna tina o cubeta).
En el caso del grifo de agua, aplica el mismo procedimiento con la bolsa, agrega bicarbonato y agua oxigenada a la mezcla anterior.
Déjalo reposar un par de horas, y después talla perfectamente con un cepillo.
¿Cómo quitar el sarro de la ducha?
Si las paredes de tu baño tienen un aspecto blanquecino y ni tallándolas con fibra se quita, existen químicos especiales para su limpieza. Puedes encontrarlos en el supermercado como “Spray anti cal” o “Spray anti sarro”.
Sin embargo, creando una mezcla de vinagre blanco, limón, bicarbonato y agua caliente, también puedes eliminar el sarro de las paredes y pisos de tu regadera.
Con estos sencillos pasos conseguirás una mejor presión en el agua de tu ducha y lavamanos, además de eliminar el sarro y suciedad de los rincones más recónditos de tu baño.