El jamón es indispensable para muchos hogares, pero ¿sabías que puedes preparar el tuyo en tu casa? Te contamos cómo hacer jamón saludable y con pocos ingredientes.
Este ingrediente es esencial para prepara una gran cantidad de platillos, especialmente los desayunos y lonches de los más pequeños, pero también de quienes tienen que salir a trabajar y buscan algo asequible que puedan llevar al trabajo.
¿Cómo preparar jamón en casa con pocos ingredientes?
Si quieres elaborar tu propio jamón y hacerlo de forma saludable, solo necesitas reunir los siguientes ingredientes y poner manos a la obra:
- 4 litros de agua
- 318 gramos de sal
- 1 cucharada de sal rosa (nitritos)
- Lomo de cerdo
- Una inyección
Lo primero que tienes que hacer es preparar una salmuera. Para ello, debes poner en un recipiente los cuatro litros de agua junto a la sal y la sal rosa; y revolver.
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Cuando este bien mezclada, deberás inyectar el lomo de cerdo con la salmuera y tendrás que dejarlo reposar durante tres días en la salmuera completamente sumergido y llevarlo al refrigerador. Para que este se quede al fondo del recipiente, puedes ponerle unos platos encima.
Una vez que haya pasado este tiempo, deberás sacar el lomo y enjuagarlo con agua fría. Una vez que lo hayas enjuagado muy bien, tendrás que secarlo con ayuda de toallas o papel de cocina para que te quede lo más seco posible. Si prefieres lo puedes amarrar para que mantenga su forma.
Luego, deberás ponerlo en el refrigerador por 16 horas y cuando haya pasado este tiempo, tendrás que ponerlo a humar a fuego indirecto a 68°C por aproximadamente cuatro horas. Para este punto ya tendrás el jamón listo, puedes servirlo frío o caliente, en rebanadas delgadas o gruesas.
¿Qué tipo de jamón es el más sano?
De acuerdo con el sitio jamones muñoz, el jamón más sano es el que ha sido curado al aire libre, ya sea jamón serrano o jamón ibérico.
Según este sitio especializado, esto se debe a que el jamón ibérico es bajo en grasas, no tiene carbohidratos, es rico en proteínas y nutrientes, tiene minerales como el fósforo, magnesio, calcio, potasio, hierro y zinc.
En tanto, el jamón ibérico y paleta ibérica proviene de animales criados en libertad, lo que hace que estos productos sean ricos en antioxidantes y ácidos grasos mono- y poliinsaturados. A eso se suma que ambos contienen vitaminas B; B-1, B-2, B-12, así como vitamina E y oligoelementos.