Si sospechas que tienes nidos de ácaros en casa, te diremos la forma efectiva para eliminarlos paso a paso y de forma fácil, rápida y totalmente efectiva.
Ya te mencionamos consejos para limpiar cobijas llenas de estos diminutos seres, pero ese sitio no es el único en el que suelen vivir y reproducirse.
Estos integrantes de la familia de los arácnidos pueden estar prácticamente en cualquier lugar, pues hay ácaros del polvo, de los animales, del jardín, etcétera.
De acuerdo con la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, esta especie no puede verse a simple vista porque rara vez los ejemplares superan los 0.5 milímetros.
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El organismo europeo también aclara que no representan un peligro para los seres humanos, pues no pican ni transmiten enfermedades mortales o de gravedad.
Sin embargo, lo que sí pueden ocasionar son alergias y problemas en las vías respiratorias que se pueden complicar y derivar en afectaciones severas en caso de no tratarse.
Los ácaros son amantes de los lugares templados y húmedos, por lo que uno de los sitios en los que suelen desarrollarse son los dormitorios y, en particular, la cama.
Se alimentan de sangre y células muertas y, cuando son muchos, dejan marcas en zonas del cuerpo como el rostro, los brazos y el pecho.
En caso de que tengas una acumulación excesiva de estos animales presentarás picor excesivo y sin aparente causa en alguna zona del cuerpo.
Otro indicio de que estás en una casa infestada con ácaros es que, al momento de estar en la vivienda, tendrás estornudos, tos, mucosidad, comezón y hasta habrá aparición de sarpullidos.
¿Cómo acabar con los nidos de ácaros?
Hay actividades fáciles que puedes incorporar a la rutina diaria para acabar con los pertenecientes a la familia de los arácnidos. Todos tienen qué ver con la limpieza.
Ventila tu cuarto cuando te despiertes, es importante que circule el aire limpio y que no haya condiciones para la generación de humedad.
- Dejar entrar los rayos de Sol a tu cuarto y demás habitaciones de tu casa.
- Haz la cama una hora después de levantarte, para que se enfríe luego de las horas que pasó con tu cuerpo encima.
- Cambia las sábanas del colchón una vez por semana.
- Mantén aseada la ropa de cama, pues acumula piel muerta y fluidos corporales que sirven de caldo de cultivo para los ácaros.
- Opta por el uso de protectores de colchón y protectores de almohadas.
- Limpia las cortinas con regularidad,
No dejes que el polvo se acumule en los muebles y, cuando limpies, hazlo con un trapo húmedo para atrapar mejor a los ácaros y que no se propaguen por el ambiente.
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