Tener chinches en tu casa podría ser peligroso si no lo detectas a tiempo, por eso es recomendable que te mantengas alerta y aprendas a identificarlas. No siempre están a la vista, por lo que debes aprender a buscarlas en lugares específicos.
Lo primero que debes saber, según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos, es que las plagas pequeñas son las más difíciles de encontrar porque las chinches pueden confundirse con otros escarabajos. Eso provocaría que la infestación se haga más grande poco a poco.
Tampoco hay que fiarse de que las picaduras son un indicador de la presencia de estos insectos, ya que no todas las personas presentan reacción.
Las primeras alertas son las siguientes:
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- Manchas color óxido o rojizas en las sábanas o el colchón causadas por el aplastamiento de las chinches.
- Manchas oscuras pequeñas, las cuales son excremento de chinches y pueden correrse en la tela como lo haría un marcador.
- Los huevos y las cáscaras, que son diminutos (de 1 mm aproximadamente) y de color amarillo claro.
- Chinches vivas.
Lugares en los que se esconden las chinches
Estos pequeños animales suelen resguardarse en varios sitios de la casa cuando no están alimentándose. Allí es donde tienes que buscarlas:
- En las costuras de las sillas y sillones, entre almohadones, en los pliegues de las cortinas.
- En los rincones de los cajones.
- En aparatos y tomas eléctricas.
- Detrás de tapices sueltos y de artículos en la pared.
- En el vértice donde la pared y el techo se unen.
- Incluso en la cabeza de un tornillo.
“Dado que las chinches son aproximadamente del ancho de una tarjeta de crédito, pueden escabullirse en escondites muy pequeños. Si en una grieta cabe una tarjeta de crédito, también podría esconderse una chinche”, según la dependencia citada.