Si has hecho de todo y no logras un capeado 'decente' en tus chiles rellenos o chiles en nogada -que están de temporada-, hoy te revelamos el truco para que te quede esponjosito y perfecto.
Capear es cubrir un alimento -chiles rellenos, huauzontles o rollitos de jamón- con huevo batido para freírlo, explica el diccionario enciclopédico de la Gastronomía Mexicana.
Para lograr el capeado, primero se baten las claras de los huevos a punto de turrón; después, se añaden las yemas, sin dejar de batir, para conseguir una mezcla amarilla y homogénea.
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Tras lo anterior, se sumerge el alimento en la mezcla para cubrirlo completamente y luego se fríe hasta que el huevo esté cocido y dorado.
Sin embargo, si quieres que tu capeado quede como de restaurante, a dicha mezcla le debes añadir un ingrediente más; además, tienes que ser muy cuidadoso a la hora de prepararla y freír.
¿Cómo se capean los chiles rellenos?
Ingredientes
- Huevos
- Harina de trigo (se necesitan 6.5 g por cada huevo)
- Chiles rellenos
Preparación
- Separa las claras y yemas de los huevos.
- Bate las claras a punto de turrón con una batidora o a mano con movimientos envolventes.
- Agrega la harina a los huevos y bate para integrarla.
- Añade las yemas e intégralas con una cuchara de madera con movimientos envolventes, hasta que la mezcla obtenga un color amarillo uniforme.
- Cubre los chiles rellenos con la mezcla del huevo (asegúrate de retirarles el exceso de humedad, para evitar que el capeado se desprenda).
- Fríe los chiles en aceite caliente. Si el aceite no cubre completamente los chiles, 'palea' un poco sobre estos, para que la parte descubierta se selle y no ocurra un desastre al voltearlos.
El vlog 'De señora a señora', experto en cocina, recomienda agregar una buena cantidad de aceite al sartén, para que los chiles puedan flotar, así el capeado quedará esponjosito y perfecto.
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