Los expertos en salud dental recomiendan realizar una profilaxis dental —también conocida como limpieza dental— cada seis meses con el fin de eliminar el sarro acumulado y evitar enfermedades como la gingivitis y la caries.
Según explica la Clínica Dental Aparicio, de España, la limpieza dental no sólo se trata de darle brillo a los dientes. En el proceso se utilizan varios instrumentos para limpiar la superficie y, en ciertas ocasiones, por debajo de la encía. Algunos de ellos son la pasta de pulir, el cepillo, hilo dental, bicarbonato y el flúor.
Esto complementa la higiene bucal con el cepillado diario, el uso de hilo dental y enjuague. Sin embargo, la diferencia es que después del tratamiento, se tienen que seguir indicaciones indispensables para no dañar su esmalte.
¿Qué puedo beber después de una limpieza dental?
Entre las más importantes, está la ingesta de bebidas. Muchas de ellas podrían disminuir la efectividad del tratamiento. Por eso, es indispensable esperar de entre 30 a 60 minutos para consumir cualquier cosa (incluso agua).
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Asimismo, especialistas en salud dental advierten que no se deben tomar bebidas calientes o muy frías, ya que pueden causar molestias como la sensibilidad dental o dolor en las encías. También se deben evitar por al menos 24 horas las bebidas ácidas o que incluyen los siguientes ingredientes:
- Azúcar
- Leche (lactosa)
- Alcohol
- Café
- Té
- Refrescos
¿Qué puedo comer después de una limpieza dental?
En cuanto a los alimentos, se recomienda evitar consumir aquellos que sean pegajosos como los dulces, o muy duros como las manzanas o semillas. Lo mejor, siempre, es comer sopas (tibias), puré de papas, plátanos o huevos. Al menos durante las primeras 24 horas de la limpieza dental.
“Los primeros días se aconseja evitar también los alimentos con colores muy oscuros (…) porque el poro de los dientes está abierto y es más sensible a la aparición de manchas”, indicaron en la clínica antes mencionada.