Los pastelitos empacados son un antojo que pueden costarle caro a la salud, ya que son ricos en azúcares, algunos de los cuales pueden ser más peligrosos que otros.
Un ejemplo de pastelito que tiene azúcares añadidos malos es el Kinder Délice, de acuerdo con la Produraduría Federal del Consumidor (Profeco).
La Profeco puso bajo la lupa el producto de Kinder Délice y descubrió que cuenta con sacarosa, dextrosa, jugo de pera y jarabe de glucosa y frutosa (JGF), sobre el cual alertó.
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El JGF es una solución acuosa que se obtiene de la descomposición de almidones que provienen principalmente del maíz, pero también del arroz, papa, cebada o trigo, explica la institución encargada de cuidar los derechos de los consumidores.
Se recomienda un consumo moderado de dicho producto, ya que está relacionado con el sobrepeso y la obesidad, de ahí la preocupación de la Procuraduría.
Hablando del total de azúcares, calorías y grasas que contiene un pastelito Kinder Délice, el organismo a cargo de Ricardo Sheffield reveló lo siguiente:
- Azúcares:13.7, gramos (g).
- Calorías: 191 kcal.
- Grasas: 10.8 g.
Aunque el pastelito en cuestión no es de los que más azúcares tiene, de los 25 que la Profeco analizó, la cantidad que contiene es alta, ya que equivale casi a la mitad de la recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que es de 25 g al día.
¿Quién es el dueño de Kinder Delice?
El pastelito Kinder Délice pertenece a la empresa Ferrero Rocher, que es presidida por Giovanni Ferrero, quien en 2019 fue nombrado por Forbes como el hombre más rico de Italia.
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